Los antojos pueden provocar obesidad en el embarazo. La dieta sana y equilibrada es de gran importancia en las mujeres embarazadas, razón por la cual, los antojos, deben ser sustituidos por las necesidades nutricionales que el médico señale.
La dieta diaria de la mujer embarazada debe de contener: alimentos proteicos vegetales y animales, frutas y verduras que son las encargadas de proporcionar vitaminas y minerales, lácteos, ricos en calcio, carbohidratos, aportados a través de cereales, pasta y legumbres y grasas saludables, necesarias para el crecimiento del feto. Es totalmenta falsa la creencia que futura mamá debe comer por dos.
La mujer embarazada por cada kilo de peso requiere de 30 calorías diarias, es decir, si pesa 60 kilos por 30 calorías requiere una dieta de 1.800 calorías diarias que aumentará a medida que vaya creciendo el bebé.
Hay que tener en cuenta la posibilidad de que la mujer embarazada padezca trastornos en la digestión y coma poco porque se sienta saciada, ya que el útero se desplaza hacia arriba y comprime el estómago. Lo que con seguridad provocará este trastorno, es estreñimiento; por ello no es recomendable dejar de comer, todo lo contrario, hay que seguir una dieta balanceada, sin saltarse ninguna comida.
Si, por el contrario, se siente mucha hambres, es recomendable realizar cinco o seis comidas diarias, pero nunca pasarse de las calorías recomendadas, para no coger kilos de más.
Fuente: www.nutricion.pro