Un estudio revela que los niveles altos de azúcar en sangre elevan la mortalidad del coronavirus

As, por Raul Izquierdo

El Hospital Regional Universitario de Málaga y el Instituto de Investigación Biomédica de Málaga analizan la influencia de tener niveles altos de azúcar respecto al coronavirus.

Casi un año ha pasado desde que se detectara el primer caso oficial de la pandemia del coronavirus, pero muchas siguen siendo las incógnitas alrededor del SARS-CoV-2. Una de ellas ha sido resuelta por investigadores del Hospital Regional Universitario de Málaga y el Instituto de Investigación Biomédica de Málaga (IBIMA).

Los niveles de azúcar en sangre también juegan un papel importante en las personas contagiadas por el patógeno. En su caso, según el estudio publicado en la revista científica Annals of Medicine, la tasa de mortalidad se eleva en aquellos pacientes que padecen hiperglucemia.

En el estudio se analizan muestras de 11.313 pacientes que fueron contagiados de coronavirus durante la primera ola de la pandemia en España, según han informado en un comunicado. Los pacientes fueron divididos en tres grupos, en función del grado de glucosa libre en sangre en el momento de recibir el alta.

Después de analizar todos los resultados, el equipo de investigadores llegó a la conclusión de que la tasa de mortalidad llegaba hasta un 41,1% en las personas que tenían hiperglucemia, con más de 180 miligramos por decilitro. Por contra, esta tasa bajaba hasta el 15% en aquellos que presentaban mucha menos azúcar en la sangre.

Por tanto, los investigadores destacan que la hiperglucemia supone otro factor de riesgo a tener en cuenta en la lucha contra el coronavirus, independientemente de la convivencia con otras enfermedades o la edad de los afectados.

Causas que aumentan el riesgo

El hecho de tener más azúcar en la sangre supone un mayor riesgo para los pacientes por varios motivos. El primero de ellos, destacan los investigadores, es que el páncreas, al ser el órgano que produce la insulina, facilita que el virus se quede en las células y las infecte.

Otra de las causas que eleva de forma considerable la tasa de mortalidad es la presencia en el organismo de otras infecciones virales, así como otras patologías que incrementan la presencia de azúcar en la sangre de forma puntual.

El jefe del servicio de Medicina Interna del hospital encargado del estudio, Ricardo Gómez Huelgas, señala que «el propio virus genera un estrés que hace que el organismo se asegure de disponer de reservar de energía incrementando el nivel de azúcar en sangre, algo contraproducente en caso de que la persona se infecte por la COVID-19″. Además, el facultativo destaca que esto se incrementa en las personas que padecen diabetes, pues parten en una situación de empeoramiento de salida.

Dieta para diabéticos: cómo hacerla correctamente

El Mundo Deportivo, por Laura Hernández

¿Padeces diabetes? Se trata de una enfermedad común en la sociedad que afecta a los niveles de glucosa en la sangre. Las personas diabéticas suelen tener estos niveles en un nivel más alto de lo recomendado y, por ello, es esencial controlar al máximo la dieta para no desequilibrar, aún más, la glucosa.

Tal y como aconseja la OMS, es imprescindible acudir a un médico para que se encargue de indicarnos las pautas que debemos seguir, en el caso de ser diabéticos. Sin embargo, a continuación vamos a darte las claves para que sepas cómo hacer una dieta para diabéticos conociendo los alimentos a evitar y los que sí que están permitidos.

Qué alimentos evitar para la diabetes

Para poder llevar a cabo una dieta para diabéticos adecuada y saludable, lo primero es acudir a un médico para que indique la prescripción que se debe seguir. Cada paciente cuenta con unas necesidades diferentes y, por ello, deberá ser un especialista el encargado de diseñar y definir el planning alimentario más adecuado para cada caso.

No obstante, existen algunos alimentos a evitar en el caso de padecer diabetes. Son aquellos que tienen una gran cantidad de azúcar y, por tanto, pueden hacer que la glucosa se dispare.

Dulces y azucarados

Si padeces diabetes, deberás evitar el azúcar por encima de todo. En la categoría de “azucarados” no solamente se incluye el blanco, sino que también se incluye el moreno o el edulcorante artificial. Los alimentos elaborados a base de azúcar tampoco se deberían tomar en una dieta para diabéticos, tales como el chocolate, la repostería, los pasteles, etcétera.

Alimentos ricos en sodio

Padecer diabetes aumenta el riesgo a sufrir enfermedades relacionadas con la salud cardíaca, por ello, deberemos controlar también la cantidad de sodio que tomamos en nuestra dieta. Y es que el sodio aumenta la presión sanguínea, algo que puede conllevar a la aparición de problemas cardíacos. La sal o alimentos salados como las patatas chips, los embutidos, la mantequilla, la mayonesa o los frutos secos deberán evitarse en la dieta.

Fritos y alimentos grasos

Las frituras se convierten en azúcar cuando son asimiladas por nuestro organismo, por tanto, deberemos evitar los preparados fritos o ricos en grasas saturadas. Estos alimentos aumentan los niveles de colesterol alto y pueden conllevar al aumento de la glucosa en el cuerpo.

Harinas refinadas

El pan blanco, la pizza, la pasta o el arroz deberá evitarse en una dieta para diabéticos. El motivo es que están elaborados con harinas refinadas, un ingrediente que favorece la aparición de diabetes, así como desajustan los procesos del metabolismo. Este tipo de harina, al entrar en nuestro cuerpo, se convierte en glucosa, porque altera el nivel de azúcar en la sangre.

Alimentos ideales para controlar la diabetes

Una vez conocidos los principales alimentos que deberás evitar, a continuación vamos a ofrecerte la otra cara de la moneda para que sepas qué alimentos son recomendados en una dieta para diabéticos. Aquí te dejamos un completo listado con todo lo que puedes incluir.

Hidratos de carbono

Si eres diabético, deberás tomar unos 130 gramos de hidratos de carbono al día. Se trata del nutriente más importante para regular la diabetes, ya que tiene un aporte mínimo de azúcares. Eso sí: en el caso de comer pasta o pan, deberás optar por la versión integral, es decir, la que no ha sido refinada.

Algunos alimentos ricos en carbohidratos son:

-Arroz integral

-Pan integral o de harina que no sea refinada

-Pasta integral

-Legumbres

Proteínas saludables

Dentro de una dieta para diabéticos tampoco deberían faltar las proteínas. Pero, para un óptimo funcionamiento del organismo, estas proteínas deberán ser magras y bajas en grasa. Como ya hemos comentado anteriormente, debemos evitar prepararlas con fritos o rebozados y apostar por métodos de cocción más saludables como a la plancha, al horno, etc.

Algunos de los alimentos que puedes incluir en tu dieta son:

-Pollo

-Pavo

-Conejo

-Pescados

-Lácteos desnatados

Otros alimentos permitidos en una dieta para diabéticos

Además de estos dos grandes grupos alimenticios, debes saber que en la dieta también puedes incluir estos alimentos:

-Verduras, sobre todo las de hoja verde

-Hortalizas como la zanahoria o los pimientos

-Frutas bajas en azúcares

-Grasas buenas como aceite de oliva, aguacate, etc.

10 alimentos para refrescar el corazón

Incluye en todas las épocas del año este tipo de alimentos

El Debate / EFE

Aunque las patologías del corazón están principalmente asociadas al frío, también pueden producirse problemas asociados a una exposición al calor excesivo, debido a que las personas pueden deshidratarse, acentuándose el riesgo cardiovascular, según la Fundación Española del Corazón.

«Pensar en la alimentación como una fuente de salud para nuestro corazón es la mejor inversión a largo plazo que podemos hacer y que nos proporcionará, no solo mayor esperanza de vida, sino también calidad», reitera Rubén Bravo, experto en nutrición y portavoz del Instituto Médico Europeo de la Obesidad (IMEO).

Además de evitar los excesos, mantenerse físicamente activo y realizar controles periódicos de los niveles de glucosa, presión arterial y colesterol, el IMEO propone incluir en la dieta un serie alimentos que ayudan a reducir la hipertensión y el colesterol LDL (malo) y a prevenir las enfermedades del corazón, que están  avalado por diversas publicaciones científicas.

Bravo traslada a Efe la recomendación de consumir regularmente, y con moderación, diez alimentos con un efecto cardioprotector especialmente indicados para la época de calor y que, según este experto, «con un poco de creatividad culinaria podemos incluirlos perfectamente en nuestros menús veraniegos».

1. Vino tinto.

10 alimentos para refrescar el corazón

«La potencia terapéutica del resveratrol y los taninos se encuentra principalmente en la piel de la uva, y en la elaboración del vino tinto la maceración se realiza con la uva completa. Los beneficios de la ingesta moderada de caldos tintos radica en sus polifenoles, que tienen poder antioxidante, efecto antiinflamatorio y reducen la presión arterial», según Bravo.

2. Pescado azul. 

10 alimentos para refrescar el corazón

Los pescados como la sardina, la caballa, el salmón o el atún, tienen de media unos 10 gramos de grasa rica en ácidos grasos poliinsaturados de la serie omega-3, y poseen gran capacidad para disminuir los triglicéridos plasmáticos, aumentar la vasodilatación arterial, reducir el riesgo de trombosis y la tensión arterial, de acuerdo a este experto. 

3. Aceite de oliva.

10 alimentos para refrescar el corazón

«Su variedad extra virgen es rica en antioxidantes, ácidos grasos monoinsaturados, vitamina E y fitosteroles, todos ellos compuestos cardioprotectores. Se considera el aceite vegetal más seguro, pero se ha de tomar con moderación porque en exceso puede contribuir a la acumulación de grasa corporal», destaca el portavoz del IMEO.

4. Nueces. 

10 alimentos para refrescar el corazón

Dos de los compuestos de las nueces, el ácido linolénico que el organismo transforma en ácidos grasos omega 3 y los fitosteroles, juegan un papel importante en la reducción del colesterol. Estos frutos secos casan perfectamente en cualquier ensalada a la que queramos añadir un toque crujiente, de acuerdo a Rubén Bravo. 

5. Jamón ibérico. 

10 alimentos para refrescar el corazón

«Esta carne, preferiblemente «de bellota» -cerdos ibéricos criados con bellota-, es un superalimento que nos aporta hierro y vitaminas del grupo B, que permiten el buen funcionamiento del cerebro y el sistema nervioso. Contiene pocas grasas saturadas, es rico en ácidos grasos monoinsaturados y tiene menos colesterol que el pollo o el pavo», según este experto en nutrición.

6. Legumbres.

10 alimentos para refrescar el corazón

«Algunos fitoquímicos de las judías, habas, guisantes, lentejas y garbanzos, como las lectinas y saponinas, están implicados de forma directa en la reducción del colesterol sérico y en la prevención de la formación de la capa de ateroma que degenera en enfermedades cardiovasculares», recalca Bravo, quien sugiere tomar las legumbres en forma de ensalada, añadiendo aceite de oliva, nueces, otras verduras y pescados azules.

7. Cereales integrales. 

10 alimentos para refrescar el corazón

La fibra es un componente alimenticio que ayuda a reducir significativamente los niveles de colesterol y que se encuentra en los cereales integrales, el salvado de avena, el germen de trigo, la avena integral, el pan integral y el arroz integral, según el experto del IMEO, quien recomienda «sustituir los cereales refinados por integrales, porque es cardiosaludable».

8. Frutos rojos.

10 alimentos para refrescar el corazón

«Las mujeres que siguen una dieta rica en frutos rojos, tomando fresas y/o arándanos tres o más veces por semana, reducen en un 32 por ciento el riesgo de padecer un infarto, según la Escuela de Salud Pública de Harvard (EE.UU.), que atribuye este efecto cardioprotector a su alto contenido de unos pigmentos llamados antocianinas», destaca Bravo.

9. Sandía. 

10 alimentos para refrescar el corazón

Bravo recalca que esta fruta presenta un alto contenido en citrulina que, al convertirse en el aminoácido arginina, favorece la dilatación y flexibilidad arterial combatiendo la arterioesclerosis. También es considerable su cantidad de licopeno, un carotenoide con propiedades antioxidantes que favorecería la buena salud muscular del corazón.

10. Ajo. 

10 alimentos para refrescar el corazón

Es un alimento rico en minerales como selenio, potasio, fósforo, magnesio, zinc y yodo, al igual que en vitaminas del grupo B, con influencia directa sobre la reducción de la presión arterial excesiva, del endurecimiento de las arterias y en los niveles totales de colesterol y triglicéridos, de acuerdo al portavoz del IMEO.

Rubén Bravo traslada a Efe, algunos consejos sobre comidas y bebidas destinados a la gente con riesgo cardiovascular aumentado, como las  personas mayores, con patologías cardiacas, renales, obesidad o diabetes, a quienes en las temporadas cálidas les recomienda: 

a) Elegir carnes libres de grasa como los pescados, las aves sin piel o las carnes magras.

b) Utilizar siempre aceite de oliva

c) Reducir los alimentos que aportan “calorías muertas” (sin apenas nutrientes) como las golosinas y las bebidas azucaradas o espirituosas.
    
d) Eliminar los alimentos precocinados.

e) Cambiar la sal por las especias.

f) Comer abundante fruta y verdura

g) Elegir siempre alimentos integrales.

Coca de San Juan o Sant Joan sin azúcar

Dulces diabéticos, por Noelia Herrero

¡Señores, que estamos en junio! Dentro de poco es San Juan, y con él llega algo súper típico de donde soy yo: la coca de San Juan. Como no me puedo imaginar una verbena sin ella, hoy os enseño a hacer la coca de San Juan sin azúcar.

El 23 de junio se celebra en Cataluña la verbena de San Juan, que es el 24 de junio. La tradición dice que es una noche mágica donde puedes pedir un deseo y se te cumplirá. La realidad, o al menos la realidad que yo conozco, es ésta:

  • Nos reunimos para cenar en familia. En mi caso, nos juntamos todos mis tíos, primos y demás en casa de uno de ellos. Cada uno lleva algo de cenar, así no tiene que estarse nadie mucho rato en la cocina.
  • Se tiran petardos, sobre todo los niños. Los no tan niños disfrutamos con los fuegos artificiales, y como son carísimos pero acaban yendo al cielo, pues no los compramos y vemos los que tiran otras personas.
  • Se encienden hogueras, aunque creo que en según qué zonas esto es muy ilegal. Yo las he visto sobre todo en la playa, enciendes la hoguera por la noche y te quedas para ver amanecer.
  • ¡Se come la coca de San Juan! O bueno, como le decimos aquí, la coca de Sant Joan.

Desconozco si esto se hace en más sitios, pero le he preguntado a algunos amigos de otras regiones y me han dicho que en su tierra no se hace. Bueno, vamos a la coca, que es lo importante.

La coca de San Juan tradicional, o coca de forner, es una masa de brioche, blandita, que está un poco en medio de un pan y un bizcocho, para que nos hagamos una idea. Se suele hacer un enrejado de crema pastelera por encima, decorando con piñones, guindas y azúcar. Como estamos versionándola un poco, no le pondremos ni guindas ni azúcar, y mezclaremos harinas para controlar la subida de glucosa que provocan los hidratos de carbono del pan. De todas formas, como siempre, si respetáis las raciones no pasa nada. De hecho, en este caso una ración es igual a una ración de hidratos de carbono: 30gr de coca tienen 10 gr de hidratos, que es una ración. Sale bastante grande, pero como es para compartir ya nos viene bien.

Últimamente se hacen muchas más versiones de la coca de San Juan, como por ejemplo:

Como la que más me gusta es la tradicional, de brioche y crema, ésa es la que os estoy enseñando a preparar hoy, pero probablemente algún día me ponga a hacer alguna de las otras 🙂

Como se tarda un ratito, os recomiendo que preparéis la crema pastelera con antelación, o bien antes de poneros con la coca o bien el día antes, conservándola en frío ya en la manga. No os explicaré cómo hacerla porque ya lo hicimos en la receta de crema pastelera sin azúcar, así no me enrollo tanto hoy

Y con esto ya os he enseñado un poquito más de mí y mi cultura, porque la verdad es que la noche de San Juan es para mí la mejor noche del año, por encima incluso de la de fin de año. Creo que es porque es verano, hace buen tiempo (no frío como en diciembre), nos podemos juntar todos (en fin de año siempre hay quien no puede), ¡y comemos coca! Si es que soy más golosa…

Os dejo ya con la receta de esta coca de San Juan sin azúcar.

Preparación: 60 min. Cocción: 15 min. Raciones: 30

Información Nutricional

Cada porción de 30gr de este brioche tiene: 85,06 kcal y 9,55 gr HC.

INSTRUCCIONES

Paso 1

Rallamos la piel del limón y la naranja, con cuidado de no llegar a la parte blanca, que es muy amarga. Ponemos las ralladuras en un bol junto con la stevia, y mezclamos.Paso 2

Añadimos la mantequilla en pomada a trozos, la leche y opcionalmente un poco de vainilla. Volvemos a mezclar.Paso 3

Añadimos el huevo batido (reservamos un pelín para pintar la masa después), batimos, y añadimos la levadura fresca, desmenuzándola con los dedos y mezclando hasta que se haya disuelto en la mezcla.

coca de san juan sin azucar - 1

Paso 4

Añadimos la harina poco a poco junto con una pizca de sal. Al principio puedes ir mezclando con una espátula, y cuando sea más consistente empiezas a amasar. Para amasar, usamos las manos y vamos estirando y doblando la masa hacia adentro, hasta que consigamos una bola compacta y bien mezclada de masa.Paso 5

Ahora hacemos el primer levado. Básicamente, pondremos la bola en un bol, untando un poco de aceite en el bol para que no se pegue la masa, y la tapamos con papel film bien sellado. Dejamos levar durante una hora por lo menos, hasta que veamos que ha doblado su volumen.

coca de san juan sin azucar - 2

Paso 6

Pasado este tiempo, estiramos un poco la masa con un rodillo, dándole la forma de una coca de San Juan. Como habrá perdido algo de volumen, hacemos el segundo levado. La ponemos sobre papel de horno, en la bandeja, y la dejamos levar otra hora, hasta que vuelva a crecer.Paso 7

Cuando haya crecido, la pintamos con un poco de huevo batido, hacemos el enrejado poniendo la crema en una manga pastelera, y decoramos con piñones.

coca de san juan sin azucar - 3

Paso 8

Precalentamos el horno a 180° durante unos 15min, bajamos la temperatura a 150° y horneamos durante unos 15min, hasta que se dore un poco. Aquí la prueba de pinchar con un palillo en el centro y sacarlo limpio también sirve ;)Paso 9

Dejamos enfriar, cortamos, ¡y listo!

Estevia, el edulcorante que arrasa en internet

Informe del Consejo Internacional: Las búsquedas en línea han crecido más de un 200% en dos años y es una presencia habitual en las redes ligada al mundo del fitness, diabetes y obesidad. Está en boca de todos

Alimente El Confidencial, por Ángeles Gómez

El azúcar (concretamente, la sacarosa) se ha erigido en el enemigo número uno de la salud humana y los mensajes que exhortan a reducir al mínimo (mejor a 0) su consumo son cada vez más frecuentes. Los consumidores, sensibles como somos a las informaciones relacionadas con la salud y la nutrición, estamos abandonando el azúcar blanco para pasarnos al azúcar moreno, panela y otros edulcorantes, entre los que la estevia es uno de los más demandados, pero no está exenta de críticas.

Lo que es incuestionable es que existe un gran interés en torno a la estevia, como revela el rastro que deja en internet y las redes sociales. El informe Análisis de conversación y tendencias de 2019, elaborado por el Consejo Internacional de Estevia, ha detectado un aumento del 254% de las conversaciones ‘online’ en inglés relacionadas con estevia y del 200% en español. Estados Unidos es el impulsor del tráfico en inglés y España para las relaciones en lengua española.

Las conversaciones negativas sobre estevia se refieren al sabor, sobre todo en el café

En números absolutos, las menciones en lengua inglesa entre 2017-2018 fueron 258.669 (frente a los 101.697 del periodo 2013-2015) y en los países de lengua española pasaron de 38.965 a 77.535.

Para el análisis, el Consejo trabajó con las empresas de estudios profesionales y de consumo. Algunas de las tendencias detectadas son un aumento de la visión positiva en torno a la estevia (un incremento más fuerte en los usuarios de lengua española) y las conversaciones negativas se referían mayormente al sabor, sobre todo en relación con el café.

Foto: unsplash/@pajevictoria.
Foto: unsplash/@pajevictoria.

En las redes sociales, la estevia también es el edulcorante favorito, y se prodiga en Instagram y Tumblr, que han ‘robado’a Twitter el 37% de las conversaciones.

El informe reconoce que la mayoría de las consultas que se hacen sobre la estevia están relacionadas con diabetes, obesidad, fittness y salud.

¿Qué dice la ciencia?

Su indicación para dietas de pérdida de peso parece clara. Rubén Bravo, del Instituto Médico Europeo de la Obesidad (IMEO), dice a Alimente que “en nuestro departamento de nutrición consideramos que es la mejor alternativa como edulcorante, porque se trata de un producto natural y no aporta calorías extras al alimento que estamos condimentando”. Existen otras opciones, como la sacarina, que no aportan kilocalorías, pero “son productos químicos sobre los que algunos estudios apuntan que un consumo excesivo podrían aumentar las probabilidades de desarrollar algunos tipos de cáncer”.

Otros endulzantes naturales, como el sirope de ágave o la fructosa sí añaden calorías extras al alimento. Por tanto, Bravo reitera que “como edulcorante, la estevia es el mejor por ser natural y porque no aporta calorías extras”.

Para personas diabéticas, “la estevia se considera un edulcorante apto y puede remplazar el azúcar”, señala Julio Sagredo, de la Fundación redGDPS. Sin embargo, “mantiene el deseo de alimentos dulces, con lo cual siempre es más recomendable acostumbrarse al mínimo sabor dulce o aprovechar alimentos, como la fruta, que son dulces de forma natural”.

Estas opiniones están refrendadas por la ciencia. Una investigación publicada en ‘Appetite’ da la razón a los dos expertos. Por una parte, este trabajo confirmó que cuando se reducían las calorías de la dieta utilizando estevia en lugar de sacarosa, las personas tenían la misma sensación de saciedad y no compensaban el déficit calórico comiendo más. Además, los niveles de glucosa e insulina postprandiales (después de una comida) eran inferiores al utilizar estevia.

La cara menos dulce la muestra una reciente investigación publicada en la revista ‘Nutrients’, que ha detectado que la estevia en dosis bajas altera la microbiota, y la disbiosis (que es como se conoce ese cambio que ocurre en la composición de la población bacteriana intestinal) se asocia a diferentes enfermedades, incluida la obesidad. Pero, en contra de lo que se podría esperar, no hubo aumento ni de peso ni de la obesidad.

¿Y qué pasa con el cáncer? El riesgo de que los edulcorantes puedan favorecer la aparición de determinados tipos de tumores planea en muchas conversaciones (cada vez menos, es cierto). Una revisión sobre 372 estudios recogidos en las bases de literatura científica no ha encontrado una conexión clara entre el cáncer y el consumo habitual de edulcorantes no nutritivos (de cero calorías), incluida la estevia, y defiende que es necesario hacer más investigaciones que aclaren esa relación.

Día Mundial de la Diabetes: En España 6 millones de personas conviven con la patología

La prevención de la diabetes desde la familia y la promoción de hábitos saludables centra la celebración del Día Mundial de la Diabetes, 14 de noviembre.

Diario Médico

Según datos del Estudio di@bet.es, la incidencia de diabetes en España es de 11,5 casos/1.000 personas al año, lo que implica que cada año alrededor de 386.000 personas desarrollan la patología. En global, alrededor de unos 6 millones de personas la padecen, sumando sus diferentes tipos (1, 2 y gestacional). Este jueves se celebra el Día Mundial de la Diabetes.

Según la Federación Española de Diabetes (FEDE), además del elevado número de nuevos diagnósticos, hay que tener en cuenta el gasto sanitario que supone: un total de 23.000 millones de euros, sumando tanto los costes directos (5.400 millones) como los indirectos (17.600 millones). Para FEDE, estas cifras son inaceptables, pues la evidencia médica corrobora que podrían reducirse las defunciones y el gasto económico.

La celebración del Día Mundial de la Diabetes se centra en la importancia de fomentar un estilo de vida saludable desde la familia con el lema Diabetes: protege a tu familia. En esta línea, desde la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición se ha presentado la campaña Familia DiabeteSEEN, para representar los diferentes tipos que se pueden dar en una misma familia

Manuel Gargallo, coordinador del área de Diabetes de la SEEN, ha señalado que el lema internacional hace doble referencia a la protección de la familia. “Resulta evidente que el adecuado control exige, además de la toma de medicación, la implantación de unos adecuados hábitos de vida en el entorno familiar. Los familiares sanos, además de compartir y reforzar estos hábitos, deben ser un apoyo psicológico y emocional para los pacientes que pueden vivir esta situación como una limitación. Además, la familia también es de vital importancia para detectar situaciones de urgencia grave e incluso estar preparados para su resolución, como ocurre con las hipoglucemias con pérdida de conciencia”.

Apoyo familiar

La idea de ‘Familia DiabeteSEEN’ es aclarar que la diabetes no es exclusiva de un grupo de edad o clase de individuo, sino que, dependiendo del tipo o circunstancia (como un embarazo), puede surgir en cualquier persona y nadie está libre de riesgo de padecerla. “Es decir, la diabetes nos puede afectar a todos”, ha puntualizado Gargallo.

La campaña también quiere resaltar que los familiares sanos no son elementos pasivos ni al margen de la enfermedad, sino que forma parte muy activa del equipo de apoyo y han de contribuir al adecuado control de la enfermedad.

La idea es mantener esta campaña en el tiempo, como fuente primaria de información y concienciación en diabetes. Las asociaciones de personas con diabetes han ayudado de forma muy significativa por su cercanía al entorno familiar tanto al control de las personas con diabetes como a la detección de nuevos casos”.

Hábitos de vida frente a la diabetes

“Una de cada dos personas con diabetes no está diagnosticada, por eso es tan importante conocer los síntomas y signos que puedan contribuir a un diagnóstico y tratamiento temprano. En muchos casos, los síntomas deben ser vistos por nuestro entorno más cercano”, ha advertido Gargallo.

La diabetes tipo 2 y la diabetes gestacional se asocian con la obesidad, por lo que es prioritario evitar el exceso de peso llevando un control alimentario que siga un patrón de dieta mediterránea, limitando el tamaño de las raciones y evitando grasas saturadas y bebidas azucaradas. Y, por supuesto, mantener un cierto grado de actividad física. “Evitando el exceso de peso se puede prevenir más del 50% de los casos de diabetes tipo 2, según la Federación Internacional de Diabetes, y también, aunque en menor medida, la de tipo gestacional. Por lo tanto, en los familiares sanos de personas con diabetes, que tienen una predisposición genética a este tipo de diabetes, las medidas de prevención son clave”.

En el caso de la diabetes tipo 1 la aparición de los llamados síntomas cardinales de la enfermedad: aumento de la cantidad de orina y de la ingesta de líquidos con importante pérdida de peso a pesar de comer incluso más de lo habitual, es un claro signo de alarma. En la diabetes tipo 2 los síntomas son mucho más desapercibidos o inexistentes, por lo que es conveniente que aquellas personas con exceso de peso y antecedentes familiares de diabetes se realicen análisis de sangre cada cierto tiempo para detectar precozmente la enfermedad.

En este sentido , según Gargallo son los especialistas en Medicina Familiar y Comunitaria los profesionales que habitualmente detectan los nuevos casos e inician las primeras medidas terapéuticas y quienes están vigilantes por si la evolución de la enfermedad precisa la participación del endocrinólogo.

Formación individualizada

A propósito del Día Mundial de la Diabetes, desde FEDE se ha puesto también en marcha la campaña Educación diabetológica ya; nuestro derecho, nuestra salud,  una iniciativa que busca conseguir que las personas con diabetes reciban la formación y la educación que requieren: individualizada, personalizada y continuada en el tiempo, para poder gestionar adecuadamente su patología y evitar complicaciones a corto, medio y largo plazo. Según Andoni Lorenzo, presidente de FEDE, “no estamos pidiendo ningún favor, es un derecho reconocido en la propia Estrategia en Diabetes del SNS y que, a día de hoy, no se está cumpliendo de una manera adecuada”.

La OMS lanza el primer programa de precualificación de insulina

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha anunciado el inicio de un programa piloto de precualificación de la insulina humana para extender el tratamiento de la diabetes en países de ingresos bajos y medianos.

La decisión forma parte de una serie de medidas que tomará la OMS para hacer frente a la creciente carga de diabetes en todas las regiones. Unos 65 millones de personas padecen la patología tipo 2 en el mundo y necesitan insulina, pero solo la mitad pueden acceder a ella, debido en gran medida a los altos precios.

“La diabetes está aumentando en todo el mundo, sobre todo en los países de ingresos bajos. Demasiadas personas que necesitan insulina se enfrentan a dificultades económicas para acceder a ella, o se quedan sin ella y arriesgan sus vidas. La iniciativa de la OMS de precalificación de la insulina es un paso fundamental para asegurar que todos los que necesitan este producto vital puedan acceder a él”, ha explicado Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS.

Se espera que la precualificación de la insulina por parte de la OMS impulse el acceso al fármaco aumentando el flujo de productos de calidad garantizada en el mercado internacional y ofreciendo a los países más opciones, y a los pacientes precios más bajos. A pesar de una amplia oferta, los precios actuales de la insulina son un obstáculo al tratamiento en la mayoría de los países de ingresos bajos y medianos. Tres fabricantes controlan la mayor parte del mercado mundial de insulina, fijando precios que son prohibitivos para muchas personas y países. 

Los datos recogidos por la OMS en 2016-2019 en 24 países de cuatro continentes mostraron que la insulina humana solo estaba disponible en el 61% de los centros de salud, y sus análogos en el 13, y que el suministro mensual de insulina le costaría a un trabajador de Accra (Ghana) el equivalente a 5,5 días de salario por mes, o el 22% de sus ingresos.

“Es de esperar que la precualificación de productos de otras empresas ayude a nivelar el terreno de juego y a garantizar un suministro más constante de insulina de calidad en todos los países”, ha afirmado Mariângela Simão, Subdirectora General de la OMS para Medicamentos y Productos Sanitarios.

La precualificación de la insulina es uno de los pasos que la OMS dará el próximo año para hacer frente a la enfermedad. Hay planes en marcha para actualizar las directrices sobre el tratamiento de la diabetes, diseñar estrategias de reducción de precios para los análogos y mejorar los sistemas de administración y el acceso a las pruebas diagnósticas. La OMS también colabora con los países para promover dietas más sanas y la actividad física para reducir el riesgo de padecer diabetes tipo 2.

Para leer todo el reportaje: https://www.diariomedico.com/salud/dia-mundial-de-la-diabetes-en-espana-6-millones-de-personas-conviven-con-la-patologia.html

Sobrepeso y obesidad, un problema que afecta al 40% de las personas con diabetes tipo 1

Un estudio muestra que la diabetes triplica el riesgo de tener periodontitis y de que esta enfermedad de las encías sea más grave

Hasta un 40% de los pacientes con diabetes tipo 1 en España presentan sobrepeso u obesidad. Son datos del estudio SED1, realizado por la Sociedad Española de Diabetes (SED) a través de la recogida de datos 647 personas con DM1 (62 pacientes pediátricos y 585 adultos), que se ha presentado en el XXX Congreso de la SED.

La diabetes tipo 1 supone aproximadamente 1 de cada 10 casos de diabetes en España. Se estima una prevalencia en la población general del 0,2 por ciento (unas 90.000 personas). Se trata, además, de un tipo de diabetes con necesidades de tratamiento específicas y complejas. Sin embargo, son escasos los datos epidemiológicos y de manejo real de esta enfermedad en nuestro país, limitándose a algunas iniciativas locales o autonómicas y que se circunscriben a población adulta o pediátrica.

La diabetes mellitus tipo 1 es una enfermedad autoinmune que ataca selectivamente a las células beta productoras de insulina en los islotes al infiltrar células inmunes. Como resultado, el organismo ya no puede producir insulina y desarrolla hiperglucemia y, si no se trata, termina causando la muerte. A pesar de los avances en la tecnología de dispositivos médicos y los análogos de insulina, así como en la generación de células productoras de insulina in vitro, todavía no existe una terapia sólida para sustituir y proteger las células beta que se pierden en la DM1.

El estudio ha determinado que la edad media en el momento del diagnóstico de DM1 es de 4,9 años en la población pediátrica y de 19,3 años en adultos. Un 48,7 por ciento de la población de la investigación presenta comorbilidades, principalmente dislipidemia (25,8%), retinopatía (19,3%) y nefropatía (5,9%).

Todavía no existe una terapia sólida para sustituir y proteger las células beta que se pierden en la DM1

Respecto al tratamiento con insulina, revela que un 75 por ciento de la población global estaba en un régimen de tratamiento insulínico basal-bolo y un 20 por ciento con bomba de insulina. El 67 por ciento de la población evaluada usó dosis correctoras de insulina y un 51% emplearon una ratio insulina/carbohidratos (ICR).

En cuanto al tratamiento futuro, España va a la vanguardia en la investigación en nuevas terapias para curar la DM1. La prevención, la protección de las células productoras de insulina para enlentecer la progresión de la enfermedad después de un diagnóstico temprano y la terapia celular sustitutiva en etapas más avanzadas son algunos dlíneas futuras.

Tarde o temprano, la cura para la diabetes tipo 1 llegará

«Probablemente, un futuro tratamiento de la DM1 consistirá en una terapia combinada de tres aproximaciones: aplicación de nanovacunas, células madre y el abordaje farmacológico», señala Benoit Gauthier, del Centro Andaluz de Biología Molecular & Medicina Regenerativa gestionado por la Fundación Progreso y salud de la Consejería de Salud (Junta de Andalucía), quien no duda en afirmar que, «tarde o temprano, la cura para la DM1 llegará. Nosotros tenemos ese sueño, que es compartido por asociaciones de pacientes y familiares, y es con ellos con los que tenemos el compromiso de trabajar sin descanso para lograrlo».

Diabetes y salud bucodental

Por otra parte, sufrir diabetes triplica el riesgo de tener periodontitis y de que esta enfermedad de las encías sea más grave, según Eduardo Montero, de la Facultad de Odontología de la Universidad Complutense (Madrid).

«La periodontitis, a su vez, hace que el control de la glucemia sea más difícil en personas con diabetes, aumentando también el riesgo de sufrir las habituales complicaciones asociadas a la diabetes (retinopatía, nefropatía, alteraciones neurológicas, enfermedades cardiovasculares…)», señala.

Por otra parte, ha recordado que el tratamiento periodontal permite mejorar los niveles de HbA1c en alrededor de un 0,4 por ciento en pacientes con dificultades para presentar un adecuado control de la glucemia, lo que supone «una disminución similar a la procurada por algunos tratamientos antidiabéticos de referencia», concluye.

El IMEO avisa de que la falta de sueño favorece el desarrollo de la obesidad

COPE/ Europa Press

La falta de descanso nocturno de calidad es un factor ambiental modificable que contribuye al desarrollo de obesidad, tanto en la edad temprana como adulta, según han avisado expertos del Instituto Médico Europeo de la Obesidad (IMEO), quienes han recordado que en España una de cada cuatro personas padece trastornos del sueño y una de cada dos tiene exceso de peso.

De forma global se pueden distinguir dos etapas del sueño que se alternan durante la fase de descanso y conllevan un funcionamiento cerebral distinto, pero fundamental para el organismo. Así, durante la fase REM, que es cuando se sueña, se observan movimientos oculares rápidos, mientras el resto del cuerpo se mantiene «paralizado» y se produce una regulación del sistema nervioso, concretamente de la hormona de crecimiento y del aprendizaje.

Es este momento en el que se reorganizan nuestros contenidos mentales, se integran los nuevos recuerdos en la memoria y se desecha la información irrelevante. «Los recién nacidos, dedican un 50 por ciento de su sueño a esta fase, mientras que en los adultos su duración es apenas un 20 por ciento», ha explicado la nutricionista especializada en tratamiento de obesidad del IMEO, Sonia Peinado.

Durante la fase no-REM se regula el metabolismo de la glucosa, por lo que todo cambio que afecte al tiempo y la calidad del sueño puede dar lugar a alteraciones en el desarrollo, el crecimiento y la actividad metabólica del paciente.

«Cuando dormimos menos horas de las debidas, nuestro organismo procura compensar el desequilibrio energético aumentando la producción de ghrelina, popularmente conocida como la hormona del hambre, y disminuyendo la concentración de leptina, que nos indica cuando estamos saciados. Esto significa que cuanto menos dormimos, más ganas de comer tendremos», han dicho los expertos del IMEO con motivo de la celebración, este viernes, del Día Mundial del Sueño.

APNEA DEL SUEÑO Y OBESIDAD, DOS PATOLOGÍAS QUE SE RETROALIMENTAN

Por otra parte, han recordado que tener exceso de grasa en la zona cervical supone un factor de riesgo para desarrollar apnea, uno de los trastornos del sueño más frecuentes que se expresa en aparición repetida de episodios obstructivos faríngeos mientras dormimos y que pueden producir colapso en las vías respiratorias en distinto grado.

La falta crónica de oxígeno contribuye al enlentecimiento del metabolismo y, esto a la larga, se traduce en mayor facilidad para ganar peso. «Además, si no descansamos adecuadamente, se verán afectadas las funciones cognitivas y tendremos alteraciones del estado de ánimo, pérdida de la concentración, dolores de cabeza al levantarse o irritabilidad. La falta de oxígeno se asocia a hipertensión diastólica y puede desencadenar hipertrofia del lado derecho del corazón o, en los casos más graves, un infarto», han dicho los expertos.

Por todo ello, la dietista del IMEO Cecilia Lorca ha avisado de que es «sumamente importante» identificar la obesidad relacionada con apneas con el fin de proporcionar un tratamiento adecuado a estos pacientes y evitar que las dos patologías se retroalimenten.

De esta forma, prosigue, también se evitarán deterioros neurocognitivos derivados de los despertares frecuentes que dan lugar a un mayor número de accidentes, disminución de la atención, mecanismos de alerta y creatividad y pueden afectar considerablemente la calidad de vida del paciente.

En concreto, a nivel físico, son más propensos a desarrollar apnea del sueño las personas con cuello corto y ancho o las que tienen retrognatia, es decir, una mandíbula inferior más pequeña que la superior y hacia atrás y los que tienen sobrepeso u obesidad. Otros determinantes que pueden influir en la aparición de esta patología respiratoria son el consumo de alcohol, tabaco y sustancias relajantes, como ansiolíticos, antidepresivos o hipnóticos.

Que las dulces calorías de San Valentín no te amarguen el día

La sobreingesta de azúcar, grasas e hidratos de carbono tiene un impacto negativo en la salud, recuerdan los expertos del IMEO, y avisan que puede causar un posterior bajón acompañado con mal humor, cansancio, estrés e irritabilidad, entre otros   

El amor entra por el estómago, decían nuestras abuelas y la ciencia lo corrobora. Existen varios estudios que muestran que no sólo ellos, sino también ellas se muestran más receptivas y predispuestas al amor y la felicidad después de una buena experiencia gastronómica. Por esta razón y de cara a San Valentín, con los escaparates colmados de dulces y azúcar en todas sus formas, los expertos del Instituto Médico Europeo de la Obesidad (IMEO) han insistido que se puede potenciar este clima de complicidad e intimidad, evitando la sobreingesta de azúcares, grasas y carbohidratos refinados. “Es comprensible que sea difícil resistir al impulso de comprar o regalar los dulces bocados que nos venden en forma de corazón o como mensaje de afecto y amor, pero debemos saber que una sobredosis de estos comestibles nos podría amargar el día, debido a sus efectos secundarios, tales como el bajón, el mal humor, estrés, irritabilidad o ansiedad”, argumenta Rubén Bravo experto en nutrición y portavoz del Instituto.
“Darse un banquete de dulces en el día de los enamorados, podría resultar contraproducente, ya que lo que inicialmente parece una inyección de energía y placer, debido a la liberación de dopamina que se produce con la ingesta de azúcar y a la bajada de los niveles de estrés por la disminución temporal del cortisol, fácilmente se puede convertir en una sobreestimulación adictiva y cada vez se necesite una mayor cantidad de dulces para obtener el mismo grado de satisfacción”, apunta el experto. Por esta razón desde IMEO recomiendan obrar con moderación y ofrecen algunos consejos prácticos a la hora de sorprender la pareja con explosiones de sabor gastronómicas.

El amor entra por el estómago, pero el exceso en dulce a veces amarga

“Si conocemos cómo funciona nuestro cuerpo a nivel hormonal, le podríamos ayudar también en cuanto a los asuntos del amor se refiere”, apunta la nutricionista clínica Carmen Escalada. Para desatar los efectos positivos de la endorfina y la serotonina, sustancias que nos permiten sentirnos contentos, relajados y descansar, necesitamos que estén en cantidad adecuada y sintetizarlas. La manera de hacerlo es a través de un aminoácido esencial denominado triptófano que nuestro cuerpo no puede generar por sí mismo, pero puede adquirir a través del consumo de ciertos alimentos como la carne, el pescado, los huevos, los lácteos y las legumbres.

Una vez asegurado un aporte de triptófano adecuado, tenemos que ser capaces de absorberlo y, para ello, necesitamos ingerir carbohidratos, explica la nutricionista. En este momento tenemos dos opciones: tomar carbohidratos de lenta absorción como las verduras, las legumbres o los frutos secos o, lo más habitual, de asimilación rápida como dulces, pasta, galletas, pan…

Habiendo, por tanto, estas dos vías, ¿por qué cuando nos sentimos decaídos, tristes o frustrados tendemos a optar por la segunda vía? La respuesta es sencilla: la rapidez de acción. Es decir, tomando dulces notaremos sensación de placer, de bienestar y de aumento de energía en mucho menos tiempo debido a que el proceso de digestión de estos nutrientes es más rápido. El problema es que a pesar de que este atajo nos va a proporcionar un momento puntual de bienestar en poco tiempo, debemos tener cuidado ya que también tiene consecuencias nocivas para nuestra salud tanto física como emocional.

En primer lugar, cuando ingerimos una dosis elevada de azúcar obligamos a nuestro páncreas a secretar grandes cantidades de insulina, la hormona encargada de mantener constantes los niveles de azúcar en sangre. Esto no sólo provoca un sobreesfuerzo en nuestro páncreas, sino que además acelera el ritmo cardiaco. Al poco tiempo de que esto ocurra, debido a la gran liberación que ha habido de insulina, los niveles de azúcar vuelven a caer drásticamente haciendo que nuestros niveles de serotonina vuelvan a descender, haciendo que aparezcan de nuevo las emociones que queríamos evitar (decaimiento, tristeza, frustración), junto a una necesidad irrefrenable de consumir más azúcar.

Los alimentos ricos en azúcares sencillos –entre ellos, cajas de bombones, dulces o galletas en forma de corazón o pastelitos con figuritas de cupido, que son entre los más buscados para el día de San Valentín–, tienen también elevadas cantidades de grasas que les otorgan un sabor extremadamente potente y agradable. Esta sensación hace que se liberen grandes cantidades de dopamina y se estimula en exceso nuestro sistema de recompensa, un conjunto de estructuras localizado en el cerebro que servía a nuestros antepasados para motivarlos a sobrevivir. Recurrir a menudo a esta sobreestimulación a modo de recompensa hace que nuestro cuerpo cada vez necesite más cantidad de estos alimentos para producir la misma cantidad de placer, pudiendo llegar a ser adictivo. En caso contrario, si dejamos de proporcionárselo, podríamos sentir irritación, tristeza o incluso una especie de síndrome de abstinencia.

Cuántas calorías nos aportan los dulces típicos de San Valentín

Azúcar, azúcar y más azúcar es lo que suele componer, junto con las harinas refinadas y las grasas menos saludables toda esta gama de bombones, galletas, magdalenas, tartas, piruletas y dulces que colman los escaparates en el día de San Valentín. “Un bombón, por muy pequeño que sea, ya nos puede aportar 70 kcal; una piruleta, 80kcal; una magdalena, 150 kcal; un donut, 220 kcal; unas galletas cubiertas de chocolate, 260 kcal; 8 onzas de chocolate con leche, 280 kcal; un trozo de tarta, cerca de 400kcal; y así, suma y sigue”, detalla la experta en nutrición deportiva Mireia Elías.

Pero, como siempre, fijarnos tan sólo en el aporte calórico es quedarse muy corto porque no sólo importan las calorías, sino de dónde provienen. Y es que precisamente este tipo de productos trae básicamente cantidades de azúcar, grasas “no saludables” y harinas refinadas, es decir, calorías vacías que no nos aportan ningún beneficio.

Por ello, con el objetivo de modificar su valor nutricional convirtiéndolo en uno más saludable y sin dejar de celebrar esta fiesta tan popular Elías aconseja:
–  Mejor dulces caseros que industriales;
– Endulzar con frutas, dátiles, orejones, canela o chocolate negro con 70-80% de cacao mínimo y un contenido bajo en azúcar (5-8g de azúcar por cada 100g);
– En bizcochos caseros, usar harinas 100% integrales.
– En confituras y mermeladas, utilizar semillas molidas como espesante en lugar de más azúcar;
– Para las tartas, sustituir la base de galleta por frutos secos triturados, como avellanas y dátiles;
– Recurrir a plátano batido con huevos y avena para elaborar tortitas caseras;
– Como cobertura en tartas se puede utilizar fruta batida, como el mango o fresas, arándanos y moras para darle un color rojizo para el día de San Valentín.
“De esta forma no sólo conseguimos reducir considerablemente las calorías, sino, además, estas provendrían de mejores nutrientes convirtiendo nuestro postre en saciante, saludable y sabroso”, concluye la nutricionista del IMEO.

Día Mundial de la Diabetes 2018: Cómo deberías comer si eres diabético

El 13,8% de la población tiene diabetes tipo 2 y el 40% lo desconoce

La Vanguardia, por Laura Conde

Según un estudio elaborado en 2013 por la Sociedad Española de Diabetes, el más completo realizado hasta la fecha, un 13,8% de la población padece diabetes tipo 2, y alrededor de un 40% lo desconoce. Pese a que la detección precoz es un proceso sencillo, pues basta una analítica regular y una segunda prueba de confirmación, gran parte de la población vive ajena al hecho de que padece diabetes o prediabetes.

“Entendemos por diabetes unos valores de glucosa en sangre por encima de 125 mg, mientras que la glucemia basal alterada, conocida como prediabetes, que puede tratarse en principio únicamente con cambios en el estilo de vida, comprende valores de entre 100 y 125 mg”, explica José Ramón Calle, asesor médico de la Fundación para la Diabetes y especialista en Endocrinología del Hospital Clínico de San Carlos de Madrid.

La alimentación es un factor fundamental tanto en situaciones de diabetes como de prediabetes

La alimentación es un pilar fundamental tanto en situaciones de diabetes como de prediabetes. En primer lugar, si la diabetes va asociada a la obesidad es fundamental perder peso y, a su vez, eliminar los alimentos perjudiciales.

Se trata, según Calle, “de reducir los hidratos de carbono refinados, de absorción rápida, y apostar por los integrales. Los cereales, arroz y pasta no integrales o la patata, además de los zumos de fruta, disparan la glucosa de forma inmediata”. Dicho de forma gráfica: “si hablamos de glucosa en sangre, nos gustan mucho más las colinas que los picos”.

Por este motivo, a Manel Mata, médico de familia del Institut Català de la Salut, concretamente del centro de atención primaria de La Mina, en Barcelona, como médico de familia, le corresponde en muchas ocasiones cambiar algunas ideas preconcebidas en algunos de sus pacientes con diabetes sobre lo que significa comer sano.

“Algunos creen que comen sano porque comen mucha fruta, que en el caso de un diabético conviene consumir con moderación y apostar por las hortalizas y verdura. También se debe limitar el consumo de pan blanco o arroz, que a priori son sanos, pero tienen carbohidratos refinados y se dispara la glucosa”. En este sentido, “no hay nada peor para un diabético que un arroz hervido, que es casi como comer azúcar o dulces. Aunque suene raro, es preferible un plato pequeño de paella, ya que el aceite del sofrito retrasa la absorción de hidratos de carbono”.

Ante toda esta información, es fácil que los no diabéticos ni prediabéticos, es decir personas con unos índices de glucosa en sangre inferiores a 100 mg, puedan creer que si consumen hidratos de carbono de absorción rápida aumente el riesgo de padecer diabetes. Mata les tranquiliza. “Algunos deportistas, por ejemplo los ciclistas, comen abundante arroz y pasta antes de una etapa, pero su cuerpo reacciona ante los hidratos segregando de forma inmediata más insulina para almacenarlos y luego obtener energía durante toda la etapa”.

Sin embargo, es recomendable apostar siempre por los cereales integrales, ricos en fibra, aunque no seamos diabéticos. “Son útiles para regular el tránsito intestinal y se ha demostrado que contribuyen a prevenir diferentes tipos de cáncer”.

Es fundamental una detección precoz de la diabtes, que debería empezar en atención primaria y podría evitar, en buena parte de casos, complicaciones posteriores e incluso la necesidad de medicación. Lo explica Mata, que insiste en la necesidad por parte de los profesionales de atención primaria de “participar de forma proactiva en la detección precoz, pues existen una serie de indicios que pueden hacer sospechar que nos encontramos ante una diabetes tipo 2 o una prediabetes”.

“La obesidad es, sin duda, el principal factor de riesgo”, concretamente las medidas de la cintura: “la barriga”, señala Mata. Según los criterios oficiales de la OMS, el límite de la normalidad se encuentra en los 102 cm de cintura en los varones y los 88 cm en mujeres, aunque el doctor señala que, especialmente en el caso de las mujeres, hay que interpretar este dato con cautela.

“Cuando llegan a la menopausia, muchas mujeres superan esta cifra por cambios hormonales y siguen gozando de buena salud”, de manera que en atención primaria se sigue utilizando el Índice de Masa Corporal (IMC). “Cuando es mayor de 25 significa que existe un sobrepeso que debería hacer saltar las señales de alarma, y solicitar un análisis que incluya la glucemia en ayunas”.

Pero no solo el sobrepeso es un factor de riesgo para la diabetes. Existen otros indicios de esta enfermedad que a menudo se pasan por alto, pues, según Mata, el principal problema de la diabetes tipo 2 es que en la mayoría de casos “es prácticamente asintomática”. Para Calle, los principales síntomas de una posible diabetes son “el cansancio extremo, tener la boca seca y por tanto mucha sed y orinar con frecuencia”, algo que gran parte de varones de cierta edad suele asociar con problemas de próstata. Lo malo de estos síntomas es que, al instaurarse progresivamente, “transcurren de media siete años desde la aparición hasta el momento real del diagnóstico”, cuando en la mayoría de los casos ya se han presentado complicaciones derivadas de la enfermedad.

Mata señala, además, que en la diabetes tipo 2 es posible que exista una pérdida de peso sin razón aparente, ya que “al eliminar la glucosa a través de la orina, el paciente puede adelgazar sin estar a dieta”, algo que también ocurre en la diabetes tipo 1. “Puede ocurrir que un niño beba y orine mucho, tenga mucha hambre, y, a pesar de que coma mucho, adelgace, pudiendo llegar incluso al coma si no se diagnostica a tiempo la enfermedad”.

También hay que fijarse en otros factores. “Si llega un paciente que no es obeso pero tiene familiares de primer grado con diabetes, es fundamental realizar el cribado”, explica Mata. Calle amplía el espectro “a las mujeres que han padecido diabetes gestacional durante el embarazo, a las que conviene vigilar más, y bebés que han nacido con más de 4 kg sin que los padres sean especialmente grandes”.

Si se dan todos estos factores, es fundamental realizar una analítica para valorar los niveles de glucosa en sangre. Para ambos expertos, lo deseable es diagnosticar la enfermedad cuando se encuentra en fase de prediabetes, ya que su aparición puede prevenirse con cambios en el estilo de vida. El tratamiento de la diabetes se aborda fundamentalmente desde tres frentes: “dieta, ejercicio y medicación”, afirma Calle.