Analizan la relación entre obesidad, discapacidad y satisfacción laboral

Investigadores de la Universidad de Málaga han estudiado la interacción entre obesidad y discapacidad y su impacto en los niveles de satisfacción laboral indicados por trabajadores de entre 50 a 64 años en diez países de la Unión Europea. Los resultados ayudarán al diseño y la implementación de políticas públicas englobadas en la Estrategia Europea de Discapacidad 2010-2020.

SINC

Analizan-la-relacion-entre-obesidad-discapacidad-y-satisfaccion-laboral_image_380El sobrepeso es un problema de salud relacionado con el consumo de más calorías de las que una persona puede gastar durante un periodo de tiempo. Actualmente afecta, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), a más del 35% de los adultos. Estas tasas, que se han doblado prácticamente desde 1980, continúan creciendo a una velocidad preocupante.

Además de los trastornos que conlleva, como el aumento de enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2, desórdenes musculares y diversos tipos de cáncer, trae consigo también otros problemas asociados con el bienestar psicosocial y las expectativas económicas individuales, así como también afecta a la productividad económica del ambiente de trabajo.

Particularmente en adultos a partir de los 50 años, la obesidad está relacionada con el incremento de incapacidad y, en consecuencia, de la probabilidad de un retiro antes de tiempo. Sin embargo, la interacción entre estas variables requiere de más investigación al respecto.

Un nuevo estudio, realizado por los investigadores Ricardo Pagán, Carmen Ordóñez de Haro y Carlos Rivas, del departamento de Economía Aplicada de la Universidad de Málaga, investiga la interacción entre obesidad y discapacidad y su impacto en los niveles de satisfacción laboral indicados por trabajadores de entre 50 a 64 años en diez países de la Unión Europea.

Los resultados, como indica Pagán, “pueden contribuir al diseño e implementación de políticas públicas específicas encaminadas a la prevención y corrección de las consecuencias de la obesidad en la satisfacción laboral entre personas con discapacidades, lo cual incrementará el estándar de vida en general y su integración en el mercado laboral en particular”.

Es en esta dirección en la que apunta la Estrategia de Discapacidad Europea 2010-2020, cuyos objetivos están centrados en asegurar que las personas con discapacidad puedan ganarse la vida en un mercado laboral abierto y sin barreras.

La investigación demuestra que los trabajadores obesos son más propensos a estar satisfechos con su trabajo que aquellos con un peso considerado normal según el Índice de Masa Corporal (IMC), aunque tener incapacidades limitadas o deficiencias en la salud contribuye a reducir los efectos positivos de dicha satisfacción laboral en personas con obesidad.

Por otro lado, las conclusiones no muestran ningún efecto de la obesidad en la satisfacción laboral según el diferente grado de incapacidad. Es necesario tener en cuenta para la correcta lectura de estos resultados que las personas obesas tienen menos probabilidades de conseguir empleo y que generalmente reportan menores niveles de auto-aceptación que individuos con un peso estándar.

Ello, unido a ser objeto de múltiples discriminaciones –también en el entorno laboral– podría apuntar a que las personas obesas tengan de partida menos expectativas de encontrar trabajo o estar bien en él, especialmente si no gozan de buena salud.

Mejor comprensión del entorno laboral

Para realizar este estudio multidisciplinar, se ha utilizado una base de datos incluyendo aspectos sobre la salud y socioeconómicos de más de 45.000 individuos de más de 50 años. Los datos han sido extraídos del Survey of Health, Ageing and Retirement in Europe (SHARE) durante los años 2004, 2007 y 2011 para estimar la satisfacción laboral con una ecuación que incluye variables para medir la obesidad y el grado de incapacidad de los trabajadores.

El cuestionario contiene información sobre salud (como los hábitos de consumo o ejercicio físico), aspectos psicológicos (equilibrio mental, bienestar, satisfacción) y socioeconómicos (tipo de trabajo y características, hábitos de consumo, educación) y de apoyo social (redes sociales) entre otros.

“Desde el punto de vista de las políticas públicas, explica el investigador, los resultados son muy importantes en tanto que consiguen una mejor comprensión del entorno laboral que puede permitir diseñar medidas para mantener y promover el empleo de este colectivo”, señala Ricardo Pagán.

A pesar de que ser los resultados muestran que la obesidad contribuye positivamente a la satisfacción laboral, la hipótesis de que sea explicado por menores expectativas sugieren condiciones laborales discriminatorias, por lo que sería necesario intervenir en los diferentes ambientes para mejorar las condiciones laborales y la productividad de personas con obesidad.

Referencia bibliográfica:

Ricardo Pagán, Carmen Ordóñez de Haro, Carlos Rivas Sánchez.»Obesity, job satisfaction and disability at older ages in Europe», Economics & Human Biology, Volume 20, March 2016, Pages 42-54. Disponible en línea: http://dx.doi.org/10.1016/j.ehb.2015.10.001

Televisa: Síndrome postvacacional en España

Cuando terminan las vacaciones es complicado aceptar el regreso al trabajo, pero para quienes no tienen uno, esa vuelta a la realidad puede traer nerviosismo

Televisa, por Yolanda Fernández


Fatiga, falta de sueño, irritabilidad, tristeza o nerviosismo. Son algunos de los síntomas que se presentan tras el período de descanso veraniego conocido como síndrome postvacacional.
Sin embargo, la crisis que sufren los españoles ha cambiado el perfil de los que padecen estos síntomas de adaptación.
Con un 27% de la población activa sin encontrar trabajo, son los desempleados los más afectados.
«Esa sensación negativa de no tener trabajo a la vuelta de las vacaciones se agrava aún más y se suma a esa tendencia depresiva, a estar intranquilo, agobiado, a no dormir bien y entonces es mucho más fuerte en estas personas», explica Rubén Bravo, portavoz del Instituto Médico Europeo de la Obesidad (IMEO).
Un 65% de los españoles sufre alguna de las dolencias relacionadas con la vuelta laboral.
Menos derrotista es la actitud de la vuelta a la rutina tras el período vacacional de los que sí conservan su empleo.
La sensación de poder reincorporarse a un puesto de trabajo ha provocado que se reduzcan los síntomas depresivos.

Al respecto, la psicóloga Elisa Sánchez señala: «Valoramos el trabajo de una forma distinta, ya no lo vemos como un castigo, como algo que nos cuesta mucho levantarnos por la mañana para ir a trabajar, si no que lo vemos como una posibilidad, como algo muy positivo, el tener trabajo es una suerte ahora mismo».
Disminuye la sintomatología adversa de la vuelta al trabajo pero aumenta la ansiedad provocada por el temor a perderlo.
«Aparecen más bien síntomas asociados al estrés, preocupación, sobrecarga de trabajo, insomnio más relacionado con síntomas de activación, que de desactivación o desmotivación», añade la psicóloga.
La inestabilidad laboral y las pocas expectativas para encontrar un empleo han provocado que para muchos volver al trabajo se convierta en un lujo.

AAE