Obesidad en la UCI: un riesgo para clasificar la gravedad del paciente crítico

Un estudio con participación española demuestra que la gravedad de los pacientes obesos es, en muchas ocasiones, clasificada erróneamente en las Unidades de Cuidados Intensivos. Los expertos insisten en que esto se debe a desviaciones respecto a los valores de partida.

SINC

Más de 650 millones de personas padecían obesidad y 1.900 millones tenían sobrepeso en 2016, según los datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Cifras como estas muestran cómo la obesidad se ha convertido en una epidemia mundial, responsable de entre 3 y 4 millones de muertes cada año y con una prevalencia creciente, tanto en niños como en adolescentes.

Los ‘scores’ de gravedad son uno de los sistemas más frecuentemente utilizados para cuantificar el peligro de un paciente con independencia del diagnóstico. A partir de ellos se puede predecir la evolución de los pacientes por medio de una cifra objetiva.

Un equipo de investigadores, entre los que se encuentra Miguel Ángel Armengol de la Hoz, estudiante de doctorado de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) y actualmente trabajando como investigador senior asociado en la Harvard Medical School y científico en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), ha puesto de manifiesto que la obesidad también tiene consecuencias a la hora de evaluar la gravedad de los pacientes cuando estos ingresan en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de un hospital.

“La obesidad está significativamente sobrerrepresentada en la UCI, donde comprende aproximadamente un tercio de los pacientes en comparación con la prevalencia del 20% de sobrepeso u obesidad en todo el mundo”, explica Armengol de la Hoz, que añade cómo los pacientes obesos tienen un mayor riesgo de verse clasificados erróneamente en cuanto a su ‘score’ cuando ingresan en la UCI.

Aunque ya existían estudios previos sobre las tasas de mortalidad y el tiempo de estancia en la UCI para los pacientes obesos, los cuales son ligeramente mayores (a igual edad, gravedad en el ingreso y estancia en la UCI), hasta ahora no se había tenido en cuenta que los ‘scores’ de gravedad en el momento del ingreso podía estar condicionados en los pacientes con sobrepeso.

El trabajo revela que entre los pacientes con ‘score’ similar se detectaron “desviaciones clínicamente pequeñas pero significativas” en el recuento de glóbulos blancos, la creatinina y el nitrógeno ureico en sangre. “Estas variaciones se dan ya en los valores de partida de los pacientes obesos en contraste con los de los pacientes con índices de masa corporal normales, este hecho puede condicionar la clasificación de su gravedad a través del ‘score’ cuando ingresan en las unidades de cuidados intensivos”, añade Armengol.

Error en la idea de partida

“Los ‘score’ de gravedad de la enfermedad se basan en la suposición de que los pacientes tienen valores fisiológicos normales al inicio del estudio y que los pacientes con ‘scores’ similares tienen el mismo grado de desviación de su estado habitual. Por ello, no tener en cuenta estas desviaciones iniciales relacionadas con el índice de masa corporal puede llevar a clasificaciones erróneas que tengan implicaciones en los estudios que se hagan acerca del paciente”, explica Armengol.

Los investigadores creen que es probable que lo que en este momento han sido solo pequeñas desviaciones clínicas, se manifiesten como más importantes a medida que mayores volúmenes de datos sean analizados de manera cada vez más precisa.

La importancia del estudio, publicado en la revista Critical Care Medicine, radica, según explican los expertos, en que la mera consciencia de que los valores de partida puedan estar alterados contribuye a mejorar la objetividad, precisión y generalidad de los modelos de predicción de mortalidad y ajuste de la gravedad en la UCI.

Referencia bibliográfica:

Severity of Illness Scores May Misclassify Critically Ill Obese Patients. November 2017. Critical Care Medicine46(3):1 DOI10.1097/CCM.0000000000002868

En qué consiste el By Pass Gástrico de IMEO

El By-Pass Gástrico consiste en una técnica mixta, restrictiva-malabsortiva. Se instaura un pequeño reservorio gástrico en la parte alta, dejando abandonado el resto del estómago, y se aplica una derivación de alimentos para que éstos no pasen por el primer tramo intestinal, provocando una eficaz malabsorción de nutrientes y por lo tanto de calorías.

  • Satisfacción con menos cantidad de alimento: El reservorio es de unos 25-30 cc que limita de manera sobresaliente la cantidad de comida que se ingiere.
  • Los alimentos ingeridos nos engordan menos: Gracias a la malabsorción producida por la derivación, muy útil en los primeros meses de reeducación alimenticia y de hábitos de vida, y posteriormente una ayuda crucial en el mantenimiento del peso saludable alcanzado.

El reservorio se conecta con un asa del intestino delgado que se desconecta del flujo normal de la bilis y los jugos gástricos y pancreáticos, disminuyendo considerablemente la absorción de los alimentos ingeridos, y en especial, la grasa. Este segmento desfuncionalizado puede ser más o menos largo en función del IMC del paciente.

Actualmente y gracias a la Microcirugía Laparoscópica es una técnica bariátrica más segura que hace unos años cuando se realizaba por vía abierta. La mortalidad se ha reducido a datos que rondan entre el 0,3% y el 1,3%, en IMEO por debajo del 0,3%.

El ByPass Gástrico aporta dos grandes beneficios, malabsorción de los alimentos, especialmente las grasas, y satisfacción con menos cantidad de alimentos. El paciente come menos, más despacio, y los alimentos ingeridos le engordan menos.

Ésta intervención quirúrgica es considerada por los Institutos Nacionales del Corazón de EEUU y por la Sociedad Americana de Cirugía Bariátrica como la cirugía más eficaz y con más continuidad para solucionar y/o ayudar frente al tratamiento de la obesidad.

El objetivo final, al igual que con cualquier cirugía de la obesidad, es inculcar en el paciente un cambio profundo de hábitos, a través de un sistema de ayuda quirúrgico, que sin él no podríamos conseguirlo a largo plazo. Y es por ello por lo que algunos pacientes ni con un ByPass consiguen solucionar su problema a largo plazo, porque el seguimiento semanal, constante y multidisciplinar en el Sistema Público no se realiza, siendo habitual las consultas cada 6 meses, al final los hábitos no se cambian y por lo tanto comenzamos a recuperar el peso de nuevo. En IMEO conocemos ésta carencia, y por lo tanto insistimos con creces en que a parte del ByPass se impliquen en el tratamiento de forma muy constante, un equipo de médicos, nutricionistas y psicólogos planificando una agenda de visitas y actividades que deberá seguir para conseguir el objetivo final perdurable de por vida:

Intervención y seguimiento

  • Las consultas de Nutrición que necesite el paciente, inicialmente suelen ser semanales.
  • Tratamiento Psicológico durante toda la duración del tratamiento, suelen ser consultas quincenales.
  • Intervención de Bypass Gástrico en un Hospital con todas las garantías, con todos los gastos incluidos (pruebas preoperatorias, consulta de preanestesia, honorarios médicos y quirúrgicos …).
  • Todos la revisiones con el Cirujano Bariátrico que necesite durante la duración del tratamiento.

Evaluación inicial y de seguimiento

  • 4 Analizador Intersticial EIS. Estado endocrino y emocional del paciente.
  • Analizador Corporal TANITA. Para evaluar no sólo el peso perdido, sino los niveles de grasa, agua, índice de tasa metabolica, retención de líquidos…
  • 1 Analítica específica de Bioquímica y Tiroides.
  • 2 Scanner Corporal iDEXA (Composición corporal segmentaria por Rx).
  • 1 Estudio de Intolerancias Alimenticias por Biorresonancia.
  • 15 Sesiones de Tratamiento de la ansiedad por Biorresonancia.

VENTAJAS

  • Buena para todo tipo de obesidades.
  • El By-Pass permite adaptar en la interven el grado de malabsorción dependiendo del IMC del paciente.
  • Analítica específica de Bioquímica y Tiroides.
  • Es más difícil de sabotear que otras intervenciones.
  • El índice de riesgo quirúrgico en la operación es inferior al 1,3% oficialmente, aunque en IMEO es un 0,3%.
  • La calidad de vida es mayor que en otras técnicas, ya que se puede ingerir todo tipo de alimentos.
  • Es reversible.
  • En EEUU y España es la técnica más empleada y tras 34 años ya se puede decir que los resultados son óptimos.
  • Al ser una técnica mixta su eficacia frente como sistema de ayuda para la pérdida de peso, la sitúa por encima del resto de técnicas bariátricas.
  • El paciente se sacia con menos cantidad y por otro lado los alimentos ingeridos le engordan menos, especialmente los grasos.

DESVENTAJAS

  • En comparación con el resto de técnicas, la desventaja principal radica en dejar abandonado gran parte del estómago, dificultando por lo tanto su diagnóstico..
  • Todas aquellas producidas por la malabsorción de los alimentos, principalmente por la carencia de Hierro y Vitamina B12.

Intervención realizada en centros hospitalarios de prestigio por nuestra Unidad de Cirugía de la Obesidad.
Para más información, diríjase al Instituto Médico Europeo de la Obesidad (IMEO), llamando al 902 10 40 50 (desde España) o al +34 91 745 17 96, o escribiendo un correo al consultas@imeoobesidad.com.