Alimentación intuitiva en niños: ¿qué es y cómo funciona?

Es una técnica muy ligada al ‘Baby Led Weaning’, la alimentación complementaria a demanda que consiste en incorporar los sólidos en bebés sin pasar por la fase de purés

El País, por Estefanía Grijota

Que tu hijo coma cuando a él le apetezca. Suena utópico, y cuanto menos muy difícil de llevar a cabo, por el riesgo que conlleva, sin embargo, no debería de ser tan difícil, ni mucho menos imposible. De hecho, son muchas las razones por las cuales la ingesta intuitiva es uno de los mejores métodos que existen para criar a un niño sano y lleno de vitalidad. Porque cuando hablamos de la relación entre los niños y los alimentos, los esfuerzos por combatir los desajustes en la alimentación podrían ser muchos, y en parte, porque una mala alimentación, como la ingesta de los alimentos inadecuados, a deshora, podría desembocar fácilmente en principios de obesidad.

Entonces, ¿dónde está el límite para criar a niños que coman lo que quieran y sean felices, al mismo tiempo que están sanos y desarrollados? Para comer de manera intuitiva es necesario seguir 10 principios que, según los creadores de esta técnica en 1995, los dietistas, Evelyn Tribole y Elyse Resch, son la integración dinámica entre la mente y el cuerpo. “Estos principios funcionan ya sea cultivando o eliminando obstáculos para la conciencia corporal, un proceso conocido como “conciencia interoceptiva”, es decir, un proceso personal de honrar la salud escuchando y respondiendo a los mensajes directos del cuerpo para satisfacer sus necesidades físicas y psicológicas”, aseguran. Un modelo que cada día está ganando más adeptos y que cuenta con más de 90 estudios hasta la fecha.

Ventajas de comer de forma intuitiva

Carmen Escalada, nutricionista clínica del Instituto Médico Europeo de Obesidad (IMEO), nos explica que esta técnica consiste en alimentarnos según nos pida el cuerpo. «Si tengo hambre como, si no tengo hambre no como, e ingiero tanto el alimento que quiero como la cantidad”, expresa. Y aunque resulte increíble, lo cierto es que nuestro cuerpo es muy sabio.

“Una ventaja muy importante para los niños es que, así como un bebé nos da la señal de que ya está saciado, un niño puede aprender a intuir cuando tiene o no hambre. Podemos poner a su disposición, y en todo momento, comida saludable, para que detecten la hora de la comida como un momento agradable, donde no le vas a obligar a nada, ni a castigar ni a premiar, sino que él podrá elegir la comida y comer con gusto”, comenta.

De esta forma, y según la experta, el cuerpo va a ser el que regule la cantidad, por lo que va a ser más fácil que le demos justo lo que necesita en cada momento, por ello, tendremos todos los nutrientes cubiertos y el peso se instaurará en lo saludable. “No es una dieta, ni busca bajar de peso, sino que la finalidad es la de que un niño esté sano y nutrido”, asegura.

Al separar el hambre física de la emocional, se reduce también la ansiedad o el estrés, ya que se trata de una técnica muy ligada al Baby Led Weaning, la alimentación complementaria a demanda que consiste en incorporar los sólidos en la alimentación del bebé sin pasar por la fase de purés y papillas, siendo el propio bebé quien se alimenta por sí mismo usando las manos. “Al ser el propio niño quien marca su hambre y su saciedad, otra ventaja es que se reducirían mucho los problemas en la edad adulta de no distinguir del tener hambre a tener ganas de comer, o el comer por ansiedad o cuando está enfadado, por ejemplo, además se reducirían los problemas de obesidad y todos aquellos derivados de esta”, concluye.

Lo cierto es que los niños nacen como comedores intuitivos: saben cuándo comer y cuándo parar. La reconocida dietista estadounidense, Evelyn Tribole, coautora de “Alimentación Intuitiva: un programa revolucionario que funciona» , dice que el riesgo de la práctica de las dietas y la alimentación restrictiva conduce muchas veces a trastornos en la alimentación, y que es preocupante entre el clima nutricional actual. “Un bebé recién nacido, por ejemplo, llorará hasta que alguien lo alimente, y a los niños pequeños, incluso, se les evitará hacerles la maniobra o el jueguecito del avión para llevarles la cuchara a la boca”, explica.

El secreto de una madre que perdió 54 kilos: «La autoestima tiene más que ver con tu actitud que con tu peso»

Suzanne Ryan se propuso un duro reto para dar un buen ejemplo a su hija en el día de su graduación. A sus 34 años, y con problemas de peso, la mujer quiso apuntarse a la vida saludable. Gracias a su fuerza de voluntad y a la dieta cetogénica (‘Plan Keto’) ha perdido 54 kilogramos y ha plasmado en un libro su experiencia: «La vida dista mucho de ser perfecta solamente porque hayas perdido peso, pero me siento muy agradecida a mí misma por la capacidad de alcanzar mis metas».

Telecinco
La californiana Suzanne Ryan, de 34 años, ha logrado su objetivo y no solo se ha convertido en un referente para su hija, sino también para todos aquellos que se proponen llevar a cabo una vida saludable y perder peso adecuadamente. En su libro ‘Simply Keto‘, la madre no solo comparte los platos que han formado parte de su dieta, sino que también deja algunos consejos para quienes piensan que el físico, y no la salud, lo es todo: «La autoestima o amarte de verdad tienen más que ver con tu actitud que con los kilos que peses».
El propósito de Ryan siempre fue iniciar una dieta basada en hábitos saludables y demostrar a su hija que si quieres, puedes: «Lo he hecho por ella. No me encontraba a gusto con mi peso (…) Desde que nació Olivia me di cuenta de que tenía un nuevo propósito en mi vida, quería poder seguir su ritmo».
La madre supo que ese momento había llegado cuando acudió a la graduación de su hija. «Hoy, por ejemplo, se graduó en preescolar, y cuando tuve que sentarme en su silla del colegio caí en la cuenta de que con 50 kilos más no habría cabido«, recoge ‘Daily Mail’.
Tras un año de serio compromiso consigo misma, Ryan perdió casi 40 kilos. Sin embargo, su libro no destaca por los números de los que se ha despedido, sino por tratar de concienciar a todo aquel que lea sus páginas de que adelgazar no asegura la felicidad: «Cada persona es diferente y no deberíamos buscar la perfección sino el progreso. La positividad y una mentalidad fuerte son fundamentales en cualquier cambio de vida sostenible».
El secreto de Ryan ha sido la dieta cetogénica-también denominada dieta Keto-, que elimina los hidratos de carbono del menú diario y que supuso la base de la polémica Dieta del Dr. Atkins. El motivo para prescindir de estas fuentes alimentarias es provocar cetosis en el organismo de la persona para forzar a su cuerpo a quemar grasa. Sin embargo, el Instituto Médico Europeo de la Obesidad la incluyó en su lista de las cinco dietas menos recomendadas en año pasado.

Después de Navidad los niveles de colesterol son un 20% más altos que en todo el verano

Lo ha demostrado un estudio realizado por investigadores del Departamento de Bioquímica Clínica del Hospital Universitario de Copenhague y del Departamento de Medicina Clínica de la Universidad de Copenhague.

El diario de Cantabria

Los niveles de colesterol son un 20% más altos después de Navidad que en el verano, según ha demostrado un estudio realizado por investigadores del Departamento de Bioquímica Clínica del Hospital Universitario de Copenhague y del Departamento de Medicina Clínica de la Universidad de Copenhague (Dinamarca).

En el trabajo, publicado en la revista ‘Atherosclerosis’, se han analizado a 25.000 daneses, de los cuales el 90% tenían colesterol elevado tras las fiestas navideñas, por lo que los investigadores pudieron comprobar que el riesgo de tener los niveles elevados es hasta seis veces mayor tras las navidades. «Nuestro estudio muestra fuertes indicios de que los niveles de colesterol están influenciados por los alimentos grasos que solemos comer durante las comidas y cenas de Navidad. El hecho de que tantas personas lo tengan elevado es muy sorprendente», han aseverado los investigadores.

Además, y a raíz de los resultados, los científicos han avisado de que si se acude al médico tras las fiestas navideñas es muy probable que el colesterol salga elevado, por lo que han aconsejado a los profesionales sanitarios tener en cuenta este hecho y a las personas cuidarse en esta época para reducir los niveles de colesterol.

Finalmente, los expertos han recordado que el colesterol elevado en sangre aumenta el riesgo de desarrollar ataques cardiacos y accidentes cerebrovasculares, principales causas de mortalidad en todo el mundo.

Qué comer en Navidad

Por ello es recomendable comer sano en las épocas festivas de Navidad, sin excesos que puedan traer alguna enfermedad o complicación en nuestra salud.  Expertos del Instituto Médico Europeo de la Obesidad (IMEO) han alertado de que, debido a los 17 días no laborales de estas navidades y a las múltiples celebraciones que se llevan a cabo estos días, los españoles van a engordar una media de entre 3 y 5 kilos. Y es que, una sola comida de Navidad nos podría aportar entre 2000 y 2500 kilocalorías.

A la hora de diseñar el menú, los nutricionistas del IMEO han aconsejado sustituir las comidas ricas en grasas y azúcares por otras, a base de verduras y hortalizas, siendo preferible su consumo en crudo para favorecer la asimilación de vitaminas, así como restringir alimentos que aportan calorías vacías, como refrescos, dulces, ‘snacks’, golosinas y alcohol, ya que favorecerán la aparición de reflujo gastroesofágico, distensión abdominal, gases, digestiones pesadas, malestar general, aumento de los niveles de glucosa en sangre, triglicéridos y colesterol.

En el día de la celebración hay que sentarse en la mesa sin hambre y, por ello, en lugar de ayunar o ‘aguantar hasta la comida’, los expertos han aconsejado hacer muchas tomas pequeñas y ligeras a lo largo del día. Asimismo, comer despacio, saborear cada plato y disfrutar no sólo de la comida, sino también de lo que la rodea, son otros de los consejos aportados.

Una vez concluida la comida, hay que retirar todas las sobras de la mesa, incluida la bandeja de dulces típicos, pero calóricos e indigestos. De esta forma, se evitará seguir picoteando. «Para poner fin de la celebración, podremos proponer a nuestros invitados actividades que ayudan a hacer mejor la digestión: paseo, baile o juegos que implican movimiento, como concurso de mímica, por ejemplo«, han señalado.

Paladeando Halloween sin ‘monstruosas calorías’

Canarias 7, por Ricardo Segura (Efe) / Madrid

Niños y adolescentes, pero también cada vez más jóvenes y adultos disfrutan de los juegos, disfraces, bailes, espectáculos, filmes y actividades que se desarrollan en torno a la víspera de Todos los Santos. Otro de los grandes motivos de disfrute en esta particular jornada son las comidas, bebidas y golosinas muy calóricas, que se consumen a menudo en abundancia y sin control, llevados por el arrebato festivo.

7.000 calorías de media

Si no prestamos atención a lo que ingerimos, la ‘Noche de Brujas’ puede aportar a nuestro organismo una enorme cantidad de ‘monstruosas calorías’, provenientes de comidas muy energéticas y poco nutritivas que, ‘por arte de magia’, nos harán aumentar de peso y nos provocarán malestar digestivo. «Durante Halloween los niños, jóvenes e incluso los adultos pueden consumir una gran cantidad de alimentos con abundantes grasas, azúcares, harinas refinadas, así como alcohol», confirma a Efe Rubén Bravo, experto universitario en nutrición y gastronomía del Instituto Médico Europeo de la Obes idad (IMEO). Según este experto, ese consumo excesivo de comidas y bebidas calóricas y poco nutritivas puede acabar en problemas digestivos, como nauseas, vómitos, inflamación abdominal, gases, estreñimiento o diarrea, acidez y pesadez estomacal. Los menores suelen consumir una media de 7.000 calorías diarias el día de Halloween.

Consejos

-«Recuerde que Halloween es una noche, y debemos concentrar los excesos solo en esas horas, evitando consumir en los días posteriores los sobrantes de dulces, alcohol y comida», señala.

-«Procure sustituir las bebidas azucaradas y/o con cafeína, por divertidos batidos naturales de frutos rojos con zumo de naranja en forma de bebida de Drácula

– Para el día siguiente, realizar una dieta muy saludable y ligera, a base de alimentos frescos y poco grasientos como la verdura, pescado, lácteos con 0% de grasa y una cantidad moderada de pan integral.

– Las formas de cocinar en los días que siguen a Halloween deben ser lo más sencillas posible evitando guisos y condimentos excesivos y optando por las ensaladas, los caldos de verduras, el pescado o pollo a la plancha y alguna pieza de fruta.

Alimentos que no hay que comer para tener una dieta saludable

CuidatePlus, por Silvia García Herráez

El consumo de ciertos alimentos evita que tengamos una adecuada alimentación. Con el tiempo, todos tenemos la idea de mantener una dieta saludable. Bien sea porque nos lo recomienda el médico para evitar algunas enfermedades, o bien porque queramos hacer un cambio en nuestro aspecto físico y mantener así unos hábitos de vida saludable.

El problema es que hay productos que nos parecen muy atractivos y ricos, pero su consumo, sobre todo si es elevado y periódico, puede acarrear serios problemas para la salud. Rubén Bravo, experto en nutrición y portavoz del Instituto Médico Europeo de la Obesidad (IMEO) afirma que “a largo plazo estos alimentos pueden repercutir negativamente en la salud, causando enfermedades como es la diabetes, colesterol alto, problemas cardiovasculares; provocando obesidad, desnutrición, falta de vitalidad y/o adicción”.

En este sentido, el experto en nutrición del IMEO incide en que debemos eliminar de nuestra dieta o consumir de forma esporádica estos alimentos si queremos tener una buena salud:

  • Bollería industrial: apenas aportan nutrientes, tienen un alto contenido en azúcar. Son muy ricos en precursores del colesterol malo (LDL) y además son adictivos.
  • Alimentos muy procesados: aquellos que están elaborados con ingredientes de muy baja calidad, ricos en azúcares, grasas saturadas, conservantes y químicos que a la larga podrían repercutir negativamente en la salud.
  • Alimentos cuya base de cocinado sea rebozados o fritos: absorben gran cantidad de grasas saturadas que se relaciona con efectos cancerígenos.
  • Embutidos demasiado grasos: principalmente por aportar grasas de origen animal (saturada).
  • Alimentos basados en harinas refinadas (pasta, arroz, la patata como tubérculo): hacen que el cuerpo capte azúcar en exceso, podrían alterar algunas funciones metabólicas y hormonales, además pueden resultar adictivos.
  • Alcohol: aporta calorías «vacías» y aumenta la sensación de hambre.

Alimentos recomendados

Por tanto, si queremos llevar una dieta sana y equilibrada, se deben ingerir aquellos que potencien el buen funcionamiento del organismo, como los que contienen más fibra. Bravo explica que “este tipo de alimentos se deben tomar a diario, excepto las legumbres que con tomarlas un par de días a la semana es suficiente. Además, su consumo se asocia sólo con beneficios para la salud, por ejemplo, aseguran una mayor longevidad y un equilibrio emocional”. En esta lista se incluirían:

  • Frutas y verduras: por cada caloría aportada hay una gran variedad de vitaminas y minerales; además son ricos en fibra y saciantes; ayudan a equilibrar los niveles de energía. Se deben consumir entre dos y tres piezas al día.
  • Legumbres: además de ser ricos en micronutrientes, aportan proteína que ayuda a mantener buena masa muscular.
  • Frutos secos en cantidad moderada: aportan grasas saludables beneficiosas para el funcionamiento cerebral, el sistema inmunitario, endocrino, hormonal y nervioso.
  • Cortes magros de carnes animales: presentan proteínas de alto valor biológico, ayudando a mantener un correcto perfil lipídico y niveles correctos de colesterol.
  • Pescado: aporta proteína y grasas saludables en forma de omega 3.

“Los beneficios de una dieta equilibrada son muy amplios y sería ideal complementar el cuidado de la alimentación con actividad física regular, manteniendo el control del estrés y otros hábitos de vida saludable, como dormir las 8 horas al día, no fumar, pensar en positivo, trabajar en el crecimiento personal e hidratarse adecuadamente”, concluye Bravo.

 

Alimentos contra el frío

Además del abrigo y la bufanda, una buena alimentación es un gran escudo para combatir contra las bajas temperaturas

Diario Vasco

Alimentos como la cebolla, el ajo o el jengibre nos ayudarán a combatir enfermedades asociadas al frío, como la gripe. Las legumbres son también un alimento muy valioso para combatir el frío.

Elegir bien los alimentos y bebidas que ingerimos es fundamental para combatir el frio, según advierten desde el Instituto Médico Europeo de la Obesidad (IMEO). En palabras de Rubén Bravo, experto en nutrición de dicha organización, “el frio exige a nuestro cuerpo un esfuerzo extra para mantener una temperatura constante de alrededor de 37º grados centígrados” y no hay nada como entrar en calor gracias a una dieta saludable.

El cuerpo, especialmente en épocas como en la que nos encontramos, nos pide alimentos calientes y calóricos, lo que puede tener una peligrosa contrapartida si no estamos lo suficientemente atentos, porque podemos ganar peso. Afortunadamente, no todos los productos tienen que ser especialmente calóricos si se toman las precauciones necesarias.

Para empezar, desde IMEO sugieren comenzar el día con un café o té y a la tarde-noche tomar infusiones, porque “además de hidratar y dejarnos con buen sabor en la boca, estas bebidas calientes ejercen efectos terapéuticos sobre nuestro organismo y estado de ánimo si se usan bien”, señalan.

Es igualmente aconsejable aumentar las raciones de fruta, preferiblemente comiendo la pieza entera, con piel o pulpa, sobre todo de cítricos y variedades de temporada con mucha vitamina C, ya que son un remedio natural para prevenir resfriados y reducir sus síntomas.

En este sentido, la ingesta de cebolla, ajo o jengibre son altamente recomendables porque son grandes defensas si se toman a diario, ya que sus efectos antibióticos, antioxidantes y antiinflamatorios los convierten grandes aliados contra un mal muy común en la época de invierno.

Para el final del día, Bravo recomienda una sopa de ajo y cebolla, “pues es el momento del día en que nuestro sistema inmunitario está en los niveles más elevados, y acompañarlas de un buen baño de agua caliente, que reforzará el resultado y nos permitirá el descanso óptimo e imprescindible para recuperarnos con solidez terapéutica”.

Propiedades antigripales

Por otro lado, es conveniente servirse de especias como el comino, tomillo y pimienta, que además de ser un buen condimento, tienen propiedades antigripales, y que en el caso de la cayena, agregada en sopas y guisos, estimula la quema de las grasas en el cuerpo.

Igualmente, conviene añadir vegetales y hortalizas que hidratarán el cuerpo y ayudarán al organismo a mantener la temperatura corporal adecuada. Alimentos como las legumbres, consumidas en su justa medida, suministran una importante cantidad de energía de forma rápida y son indispensables para una alimentación equilibrada.

En cuanto a las cosas que deben evitarse, conviene aligerar las grasas de los platos de puchero (potajes, guisos, lentejas, cocidos, alubias) cocinándolos con verduras (con recetas culinarias “a la jardinera”) o preparándolos de forma tradicional, añadiendo ternera, morcilla y chorizo, pero evitando el tocino.