Día Mundial de la Obesidad: la tasa de gente con kilos de más se ha duplicado desde 1980

El 12 de noviembre de todos los años está dedicado a informar y concienciar sobre una de las mayores lacras de la humanidad: los kilos de más. Sus efectos negativos no se limitan a lo visual, sino que ponen en riesgo la salud de todos

El Confidencial, por Álvaro Hermida

El almacenamiento de grasa corporal es un problema de salud mundial. Así como las terroríficas epidemias como el ébola, los esfuerzos que se llevan a cabo para ponerle freno no tienen el resultado deseado. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en 2014 más de 1.900 millones de adultos tenían sobrepeso y 600 millones eran, directamente, obesos. Lo peor es que esas cifras no han hecho más que aumentar, y el hecho de que hoy sea el Día Mundial de la Obesidad hace que nos encontremos en el momento perfecto para ver dónde estamos, de dónde venimos y, lo más importante, hacia dónde vamos.

Qué es la obesidad

A lo largo de los años se han dado multitud de definiciones de esta condición física. Actualmente, la más aceptada es que tanto obesidad como sobrepeso son el aumento anormal de grasa corporal que puede tener perjuicios para la salud.

Para clasificarlas, se utiliza el índice de masa corporal (IMC). Esta es una comparación estadística entre la altura de una persona y su peso. La fórmula que lo define es el peso de una persona dividido por el cuadrado de su altura en metros (kg/m²). Si bien otros factores tienen mucha relevancia individual y se ignoran con esta estadística (como la masa muscular, que es más pesada que la grasa), es una buena forma de establecer unos límites clasificatorios e informativos para la población. De hecho, como la propia Organización Mundial de la Salud aclara: «El IMC proporciona una útil referencia sobre el sobrepeso a un nivel de población total, dado que no diferencia entre sexos o edades. Dicho esto, se debe tener en cuenta que puede no corresponder al mismo nivel de ‘gordura’ para individuos diferentes«.

Según la OMS, los valores superiores a 25 se consideran sobrepeso, y aquellas personas que superen un índice mayor a 30 son considerados obesos. Por poner estos datos en perspectiva, podemos decir que un varón de 1’8 metros y 70 kilos tiene un IMC de 21,6. Si llega a los 81, alcanzará el sobrepeso; y si toca los 98, será considerado obeso.

Sus peligros

Junto con el tabaco, parece que hemos llegado todos nosotros a la conclusión de que estar obeso no es sano. La gente que la padece, según explican una grandísima cantidad de estudios científicos y confirma la OMS, tiene un riesgo mucho mayor de padecer enfermedades cardiovasculares, así como metabólicas (diabetes tipo II), problemas musculoesqueléticos como la osteoatritis y una mayor tasa de cáncer, en especial de colonmama endometrio.

El estado actual de la obesidad en el mundo

Tenemos que tener en cuenta que siempre ha habido cierta prevalencia de esta enfermedad entre la población general. Es más común en áreas urbanas y, según explican desde la OMS, no es raro que en un mismo edificio de un país en vías de desarrollo y del tercer mundo, convivan puerta con puerta una familia con problemas de obesidad y otra con desnutriciónEn 1980 la tasa mundial de sobrepeso no superaba el 13,5%, y según datos de 2015 proporcionados por la OMS, hoy en día ha superado el 39%, más de una tercera parte de la población.

Según explican los investigadores Lindsay M. JaacksStephanie Vandevijvere y el resto de su equipo de la Harvard T. H. Chan School of Public Health, de Estados Unidos y de la Universidad de Auckland en Australia, los niveles y la distribución de la prevalencia de la obesidad en un país son ejemplo de su desarrollo económico. Según los investigadores, existen 4 fases diferentes. En la primera, característica de los países del tercer mundo, la obesidad infantil es muy reducida y, en adultos, las mujeres tienen niveles mucho más altos que los hombres. La segunda fase se caracteriza por una equiparación del número de obesos de ambos sexos y un aumento sustancial de la obesidad infantil. Por último, los países desarrollados (como España) tienen más varones obesos que mujeres con esa misma condición. Ese punto de inflexión se dio en Italia en el año 2013, en Francia en 2011, en España en 2009 y en Alemania en 1993. De hecho, «se espera que Estados Unidos y Reino Unido cumplan con los pronósticos antes de 2022«, explican los investigadores.

Como se explicaba al inicio, a nivel mundial hay 1,9 millardos de personas con sobrepeso y 600 millones con obesidad. Eso es más que preocupante, en el año 2014 el 39% de los adultos del planeta tenían más kilos de los que sería normal. A su vez, también supone un gran riesgo para las nuevas generaciones, sobre todo para las de los países desarrollados, dado que en 2013, explican desde la OMS, «42 millones de niños menores de 5 años eran obesos».

Las perspectivas de futuro

Aunque los datos son más que limitados, pues al contrario que la mayor parte de enfermedades relevantes, no todos los obesos van al médico por su condición, se calcula, según datos del Centers for Disease Control (CDC) estadounidense, que en Estados Unidos un 39,3% de la población (un total de 93,3 millones de adultos) padece obesidad. El futuro no ofrece datos esperanzadores, ni para los habitantes del país norteamericano ni para el nuestro (dado que en una gran cantidad de datos macroeconómicos, los suyos son muy similares a los nuestros). Según el National Bureau of Economic Research de Estados Unidos, en el año 2025, el 83% de los varones y el 75% de las mujeres sufrirán sobrepeso u obesidad.

Qué podemos hacer

Muchas propuestas se han puesto sobre la mesa para luchar contra este tipo de problema de salud. La limitación del azúcar en los refrescos y la concienciación son las propuestas más comunes, pero otras vías son recomendables. Según la OMS, existen tres caminos claros:

  • Individual. A fin de cuentas nuestro cuerpo pertenece solo a una persona y la responsabilidad personal en la pérdida de peso es ineludible. Entre los aspectos clave está «la limitación de la ingesta de azúcares y grasas, el aumento de la actividad física regular (1 hora al día para los niños y 150 minutos semanales para los adultos) y un aumento del consumo de frutas, verduras, frutos secos, cereales integrales y legumbres».
  • Social. Es imposible conseguir cambios de relevancia macroscópica sin un cambio en las políticas sanitarias de un país. Es por esto que la OMS recomienda «un apoyo por parte del sistema a los individuos que pretenden llevar a cabo los cambios en su estilo de vida antes mencionados a través de la colaboración de las entidades tanto privadas como públicas que tienen peso en este tipo de reformas». Por otro lado, la organización internacional también recomienda que «los cambios de actividad física y dietéticos de la población deberían ser asequibles y accesibles para todos, especialmente para los individuos con menor poder adquisitivo».
  • Sector privado. Es innegable que cada vez consumimos más alimentos preparados en masa por la industria. Esta puede llevar a cabo reformas que jueguen a favor de todos como «reducir los contenidos de azúcar, grasas y sal de los alimentos, asegurarse de que los alimentos sanos son una opción asequible, llevar a cabo campañas de marketing responsables, sobre todo aquellas en las que el público objetivo son niños y asegurarse de que un estilo de vida saludable es posible en el entorno laboral».

Lo que tenemos que entender, al igual de bien que comprendemos que la obesidad es mala, es que esta condición se puede prevenir y se puede remediar. Está en nuestras manos, ya sea con el esfuerzo personal como con nuestro voto y con la promoción de iniciativas sociales y políticas, hacer de la obesidad un problema del pasado.

Los impuestos sobre el azúcar no evitarán solos la obesidad infantil

Cataluña desafía al ‘lobby’ azucarero. Los expertos creen que urgen más medidas como la educación, el etiquetado y la promoción del deporte

El País, por Beatriz Portinari
La batalla contra la obesidad ha pasado a otro nivel en Cataluña con el impuesto a las bebidas azucaradas que entra hoy en vigor. Sin embargo, los nuevos precios quedan muy lejos del 20% impositivo que recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS) para que realmente sea efectivo. ¿Cómo puede beneficiar esta medida a los niños, el sector más vulnerable, con elevadas tasas de sobrepeso? La idea es que un aumento del precio obligue a cambiar los hábitos de compra, empezando por una reducción del elevado consumo diario de bebidas azucaradas entre los más jóvenes. El bolsillo o la salud. Según los datos de la última Encuesta Nacional de Salud, dos de cada 10 niños españoles tienen sobrepeso y uno de cada 10 sufre obesidad; es decir, el 27,8% de los menores en nuestro país ya presenta algún tipo de problema de peso que con los años puede desembocar en diabetes tipo 2 y enfermedades cardiovasculares.

Más medidas, menos obesidad

Aunque el “impuesto saludable” de Cataluña es un primer paso, los expertos señalan que para conseguir una reducción real de la epidemia de la obesidad infantil serán necesarias medidas globales, interdisciplinares, que van desde la educación al etiquetado, de la promoción del deporte sin patrocinios encubiertos a la subvención del consumo de frutas y verduras, pasando por un control exhaustivo -que ahora no existe- del cumplimiento de la normativa publicitaria, como el código PAOS, que apenas se cumple. La revisión del contenido de las máquinas de vending en colegios, cancelar las excursiones a fábricas de comida rápida o de bebidas carbonatadas y la no inclusión de juguetes en los productos de menor perfil nutricional son otras medidas necesarias para que se observe un impacto real en la salud infantil.

“Centrar la atención solo en las bebidas azucaradas es un error. ¿Qué sucede con el resto de productos procesados? ¿Desde cuándo lo más saludable, como nos intenta vender la industria, son desayunos y meriendas con bollería, galletas y cereales hiperazucarados? El problema es que el consumidor no es consciente del riesgo para la salud que asume al comprar a sus hijos ciertos productos que son rápidos de cocinar incluso en casa, algo muy cómodo para el ritmo de vida que llevamos. Y tampoco es consciente del poder que tiene: si cambiase la demanda por alimentos frescos y saludables, la oferta tendría que cambiar porque lo que busca toda empresa es ganar dinero. Pero no podemos pedir que las multinacionales protejan nuestra salud porque eso es tarea de los gobiernos”, explica Miguel Ángel Lurueña, divulgador científico y autor del blog Gominolas de Petróleo.

Precisamente, en España el gobierno prometió el pasado diciembre aplicar la tasa a las bebidas azucaradas en todo el país. Pero las presiones del lobby azucarero consiguió, en apenas tres meses, que la propuesta quedase en un cajón. Tenemos reciente y cercano el caso de Portugal, que tras el anuncio de este tipo de impuestos perdió una inversión de 40 millones de una importante multinacional de bebidas carbonatadas. Tampoco hay que perder de vista que el sector de los refrescos aporta 12.000 millones de euros a la economía nacional (un 1,4% del PIB). Según las últimas cifras facilitadas por la Asociación de Bebidas Refrescantes (Anfabra), en España facturaron 4.500 millones de euros en 2015, un 2,8% más que el año anterior: los españoles cada vez consumen más este tipo de bebidas.

El caso de Ámsterdam

Un ejemplo de política de salud pública sin afán recaudatorio y realmente comprometida en la lucha contra la obesidad podría ser Ámsterdam, que después de analizar sus elevadas tasas de sobrepeso infantil diseñó un programa global para reducirlo, como fuera, barrio por barrio. Implicaron a colegios, profesores, entrenadores, padres, sanitarios: todos los colectivos en contacto con niños fueron movilizados para cambiar los hábitos de vida y contribuir a crear un entorno saludable.

Entre las medidas impulsadas por el Ayuntamiento de Ámsterdam se incluye la prohibición de llevar zumos a las escuelas (sustituidos por agua o leche), la sustitución de bollería industrial o casera por frutas en las celebraciones escolares, o la prohibición de los patrocinios de marcas de bebidas carbonatadas y comida rápida en eventos públicos. También se subvenciona el acceso a polideportivos y actividades deportivas para familias sin recursos; se imparten clases colectivas para aprender a cocinar de forma saludable, se garantiza que los niños tengan acceso a frutas y verduras en el colegio e incluso se estudia los patrones del sueño. El resultado: entre el año 2012 y 2015 se ha reducido un 12% la obesidad infantil, según los últimos datos del Amsterdam Healthy Weight Programme.

“Los datos de este proyecto son interesantes, pero sin un grupo de control no podemos valorar hasta qué punto el descenso de la obesidad ha bajado por todas esas medidas o porque cambiaron sus patrones de alimentación por otro motivo. Cuando es un fenómeno multifactorial como este, se necesitan más parámetros, como hacer un seguimiento en las tiendas de lo que compran ahora para saber si han cambiado también sus hábitos de alimentación en casa. En marzo se ha publicado otro estudio sobre un condado de Maryland, en Estados Unidos, cuyas políticas de reducción del consumo de bebidas azucaradas van acompañadas de toda una batería de medidas muy complejas. Al final, como escribí hace poco, redujeron el consumo de refrescos en un 20% y de zumos en un 15%, pero es un ejemplo de trabajo global contra la obesidad, no solo unos impuestos. La clave no es restringir sino dar alternativas saludables a la población”, apunta Luis Jiménez, autor de libros como La Guerra contra el sobrepeso y El cerebro obeso, donde analiza las razones del entorno obesogénico en el que vivimos y el funcionamiento del cerebro para adoptar hábitos saludables o no.

El éxito de la subida de impuestos a productos no saludables en otros países está reflejado en el documento Adaptación Española a las Guías Europeas sobre Prevención de la Enfermedad Cardiovascular, con los siguientes datos: “Las estrategias de precios pueden conducir a una disminución de las ventas de alimentos no saludables y a un aumento de las ventas de frutas y verduras, mejorando el consumo de energía y nutrientes, el IMC y la salud. El impuesto a la grasa en Dinamarca originó una disminución de su consumo de un 10-15% y el impuesto a la comida basura en Hungría hizo que las ventas cayeran un 27%. El impuesto a las bebidas azucaradas en México provocó un descenso en las compras del 12%, con mayor intensidad en los hogares de nivel socioeconómico bajo, donde alcanzó el 17%”.

Países como Alemania se han atrevido a gravar las bebidas azucaradas con un 20% del precio, Inglaterra quiere sacar las máquinas de vending no saludables de los hospitales, Francia ha prohibido el “relleno gratis” de bebidas azucaradas, Chile obliga a advertir en el etiquetado los altos contenidos en grasas, calorías, sal y azúcar, prohíbe la publicidad atractiva para niños en estos productos e incluso ha retirado los juguetes dentro de huevos de chocolate. En España, las medidas eficaces y multidisciplinares contra la obesidad ni están ni se las espera.

Inglaterra propone un plan para demorar las operaciones de obesos y fumadores

El Servicio Nacional de Salud (NHS) de Inglaterra ha afirmado que toman esta decisión para equilibrar sus reservas, ya que el servicio está a punto de reventar

Cadena Ser, por David Justo

1473071416_953439_1473073401_noticia_normalExceptuando los casos de carácter grave, las operaciones a obesos que presenten un índice de masa corporal superior a 30 o a los fumadores podrían ser demoradas en el hospital público Vale, en North Yorkshire (Noreste de Inglaterra). Es la nueva medida tomada por el Servicio Nacional de Salud (NHS), calificada por el Colegio Real de Cirujanos como la más severa que ha visto nunca.

El Colegio Real de Cirujanos ya había llevado a cabo, a principios de este año, una investigación en torno al NHS en la que se dieron a conocer las restricciones sobre el acceso a la cirugía en su servicio que ahora han puesto en marcha.

Medida para ‘equilibrar las reservas’

El director de proveedores del servicio del NHS Chris Hopson ha afirmado que durante las próximas fechas se verán más decisiones de este tipo debido a que los proveedores no pueden equilibrar sus reservas. Según Hopson, el servicio está «a punto de reventar», por lo que considera que esta nueva medida es la única opción para equilibrar las reservas y lograr el máximo beneficio con los limitados recursos disponibles.

Mientras tanto, los médicos afirman que la cirugía en personas obesas podría dar lugar a complicaciones y, por lo tanto, supondrían un riesgo para la salud de los pacientes.

También expresan que la recuperación de una operación de una persona obesa también puede verse afectada puesto que pueden ser menos capaces de participar en fisioterapia u otras formas de ejercicio físico.

Otras empresas como Luton Care Commissioning Group o East and North Hertfordshire ya habían implementado esta decisión con anterioridad, pero ha sido la medida tomada la Servicio Nacional de Salud la que ha levantado ampollas en la sociedad.

Críticas a la medida de NHS

Las críticas a la decisión tomada por el NHS no han tartado en llegar. Muchas han sido las personas que han expresado su preocupación porque el movimiento del servicio nacional está motivado para ahorrar dinero y no para preservar la seguridad del cliente.

La secretaria de Salud Diane Abbott ha expresado su enfado y explica que la esta medida es «una inaceptable violación de un servicio universal.

Cameron quitará las ayudas sociales a los obesos desempleados que no se traten

El primer ministro británico asegura que no es justo pedir a los contribuyentes que costeen los subsidios de quienes rechazan la ayuda y el tratamiento que les podría llevar de nuevo a la vida laboral.

ABC.es

obesos--644x362Los desempleados británicos con problemas de obesidad que no cumplan el tratamiento médico para adelgazar podrían perder prestaciones sociales, según un plan que anunció hoy el primer ministro del Reino Unido, David Cameron.

El jefe del Gobierno británico ha trasladado su propuesta al ministerio de Salud para que evalúe las pautas en las que tanto los obesos como los alcohólicos y drogadictos «con condiciones tratables» que no se sometan a terapia podrían perder los subsidios estatales.

«Algunos tienen problemas de alcohol o de drogas, pero rechazan tratarse. En otros casos, hay gente que tiene problemas de peso que se podrían solventar, pero en lugar de eso eligen llevar una vida sustentada por las ayudas y no trabajar», sostuvo Cameron.

Para el primer ministro, «no es justo pedir a los contribuyentes, que trabajan duro, que costeen los subsidios de la gente que rechaza la ayuda y el tratamiento que les podría llevar de nuevo a la vida laboral».

Subsidios para 2,5 millones de británicos

A tres meses para las elecciones generales en el Reino Unido, el líder conservador dijo que su Gobierno «está decidido a proporcionar a las personas las mayores ayudas posibles para devolverles a una vida plena».

La consejera del ministerio de Salud Carol Black, encargada de evaluar la propuesta, señaló que está «profundamente interesada en superar los retos que representan este tipo de personas que solicitan subsidios».

«Esta gente, además de tener problemas que han arrastrado durante mucho tiempo y complicaciones con su estilo de vida, sufren la gran desventaja de no estar integrados en el mundo laboral, algo tan básico en la sociedad», dijo Black.

En el Reino Unido, donde bajo la legislación actual no se requiere someterse a tratamiento para pedir prestaciones, cerca del 60 % de los 2,5 millones de personas que reciben subsidios por enfermedad llevan cobrando esas ayudas más de cinco años.

Sarah Ferguson pierde 20 kilos para deshacerse del apodo ‘Duquesa de Pork’

A golpe de exclusiva, revela el infierno que ha vivido por su peso.
‘Siempre estaba enfadada. Mi refugio era la comida’
Decidió adelgazar al ver que pesaba lo mismo que en el embarazo.
El Mundo.
FergieEl sobrepeso ha sido el difícil compañero de viaje en las últimas décadas de Sarah Ferguson (54 años), la ex mujer del príncipe Andrés de Inglaterra. Con unos 20 kilos menos, la que fuera nuera de la reina Isabel ha concedido una entrevista exclusiva a la revisa ¡Hello!, donde cuenta el martirio que ha sufrido por la culpa de sus kilos de más. Además de confesarse en la revista, ‘Fergie’ luce nueva figura y rostro rejuvenecido (además de los kilos perdidos con la dieta, parece haber perdido años gracias a Photoshop) en una serie de fotografías tomadas en Verbier, el refugio alpino donde siguió su régimen.

«Estaba siempre enfadada», ha revelado la ex duquesa de York, añadiendo que llegó a estar desesperada: «No creía que iba a poder adelgazar, [creía] que había perdido el control. No cabía en mi ropa. Me refugié en la comida».

El acicate

Ferguson explica que lo que le llevó a intentar, una vez más, volver a recuperar el peso de antes fue que se dio cuenta de que pesaba lo mismo que cuando estaba embarazada de su primera hija, la princesa Beatriz (25). «Eso me asustó. Beatriz fue una niña que pesó 3,8 kilogramos y yo estaba a 2,721 kg del peso de mi embarazo. Decidí que algo tenía que cambiar«.

Fue entonces cuando comenzó un plan en el ‘resort’ de esquí Verbier (Suiza), el escenario donde ha tenido lugar esta transformación física y mental en la que ha tenido mucho que ver su entrenador personal, el británico Josh Saltzman. ‘Fergie’ ha seguido durante cinco meses su régimen, basado fundamentalmente en reducir el azúcar y un programa de ejercicios.

En esta entrevista, la primera con su nueva imagen, asegura que durante los años que tuvo sobrepeso se armaba «de valor» para salir al a calle. «Cada vez que había un titular sobre ‘La duquesa de Pork’ o ‘Fat Frumpy Fergie’ [algunos de los sobrenombres que le adjudicaban los tabloides]… no sabían lo que me dolía en lo más profundo de mi alma», ha confesado.

En su intento desesperado por perder peso pidió a un fabricante de té que creara algunas bebidas personalizadas para intentar calmar su hambre. El primero está basado en en el sabor del pudding inglés, fresas y nata y chocolate. La segunda incluye los sabores de champán rosado y gin tonic.

Fergie, en 2010Aunque el resultado tiene que ver también con la dieta sin azúcares y el ejercicio diario, muchas amigas se han interesado por estos tés que podría estar interesada en comercializar, dado que las deudas le han estado persiguiendo desde que su negocio de estilo de vida y bienestar y por cuyas deudas ha estado perseguida hasta hace muy poco. Esta no sería la primera vez que ‘Fergie’ hace caja con su régimen. La ex del príncipe Andrés ya fue imagen en EEUU de Weight Watchers.

 

Estadíticas de obesidad 2012

Como cada año, con el motivo del Día Mundial de la Obesidad que se celebra el 12 de noviembre, el Instituto Médico Europeo de la Obesidad (IMEO) hace un repaso y resumen de las estadísticas más relevantes de obesidad difundidas en el transcurso del año pasado por los organismos más reconocidos a nivel mundial en términos de salud: la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), la Asociación Internacional de Estudio de la Obesidad (IASO), el Centro Nacional para Estadísticas de Salud de EEUU (NCHS), la Asociación de Estudio de la Obesidad de Inglaterra (ASO) y el Instituto Nacional de Estadísticas de España (INE), recogiendo también algunos datos estadísticos que han sido titulares durante el período XI.2011 – XI.2012.   

 A continuación, ponemos a la disposición de los Medios este breve recopilatorio con sus acentos y matices que muestran la evolución de la obesidad, tanto en España, como en el Mundo, y su preocupante aumento durante los últimos años. De modo que ya podemos tomar nota de las previsiones estimadas, aún más alarmantes, que se hacen de cara a las décadas venideras.  

  • La prevalencia mundial de la obesidad casi se duplicó en el período 1980-2008, afectando en 2008 a quinientos millones de hombres y mujeres mayores de 20 años, siendo más frecuente en las mujeres que en los hombres. Estadísticas Sanitarias Mundiales 2012 de la OMS
  • Cada año mueren en el mundo 2,8 millones de personas debido al sobrepeso o la obesidad.La OMS prevé que 7 millones de personas perderán la vida a causa de enfermedades no transmisibles en 2030, debido a factores de riesgo comportamentales y físicos como el sedentarismo, el sobrepeso y la obesidad. Estadísticas Sanitarias Mundiales 2012 de la OMS                                                                                                                        
  • Más de una tercera parte de las personas mayores de 65 años en EEUU eran obesos en 2007-2010. Se estima que en 2050 el número de estadounidenses mayores de 65 años sería más del doble, aumentando de 40,2 millones a 88,5 millones (Encuesta NHANES). Una persona obesa incurre un 25% más en el gasto de salud que una persona normal. La obesidad es responsable del 5-10% del gasto sanitario total en EEUU. Obesity: update 2012 de la OCDE
  • Una de cada dos personas tiene sobrepeso u obesidad en más de la mitad de los países de la OCDE. Se prevé que esta tendencia siga en aumento y en algunos países dos de cada tres personas tendrían obesidad dentro de diez años. El ranking es encabezado por Grecia, Estados Unidos, Italia, México, Nueva Zelanda y Chile. «Obesity: update 2012» de la OCDE

Estadísticas  Sanitarias  Mundiales  2012  de la OMS

  • Cada año mueren en el mundo 2,8 millones de personas debido al sobrepeso o la obesidad, según el estudio Global health risks: mortality and burden of disease attributable to selected major risks. Ginebra, Organización Mundial de la Salud, 2009.
  • La prevalencia mundial de la obesidad casi se duplicó entre 1980 y 2008, año en el que el 10% de los hombres y el 14% de las mujeres del mundo eran obesos, frente al 5% de los hombres y el 8% de las mujeres en 1980. Se calcula que en 2008 la obesidad afectaba a quinientos millones de hombres y mujeres mayores de 20 años, y en todas las regiones de la OMS era mas frecuente en las mujeres que en los hombres. Las mayores cifras de prevalencia del sobrepeso y la obesidad se registraron en la Región de las Américas (sobrepeso: 62% en ambos sexos; obesidad: 26%) y las mas bajas, en la Región de Asia Sudoriental (sobrepeso: 14% en ambos sexos; obesidad: 3%). 
  • En la Región de Europa, la del Mediterráneo Oriental y la de las Américas, mas del 50% de las mujeres tenían sobrepeso. Y en las tres regiones, aproximadamente la mitad de estas mujeres eran obesas (un 23%, un 24% y un 29%, respectivamente). 
  • En España, la obesidad como factor de riesgo que se asocia a un aumento de la mortalidad y la morbilidad alcanzaba en el 2008 en adultos mayores de 20 años, según estimaciones de la OMS, el 24,9% en hombres y el 23% en mujeres[1]. Ambas cifras siguen siendo muy altas, comparadas con los índices en países como Alemania (23,1% hombres y 19,2 %mujeres), Francia (16,8 hombres y 14,6 mujeres), Grecia (18,8 hombres y 16,1 mujeres) o Japón (5,5 hombres y 3,5 mujeres) y están superadas sólo de países como EEUU (30,2% hombres y 33,2% mujeres) o Arabia Saudita (29,5% hombres y 43,5% mujeres). 
  • Las enfermedades no transmisibles son un problema de salud de primer orden en el siglo XXI. La OMS prevé que la cifra anual de defunciones por ENT alcanzará los 55 millones en 2030. El 11% de estas defunciones por ENT a nivel mundial se atribuyen a los factores de riesgo comportamentales y físicos: sedentarismo, sobrepeso y obesidad (sólo éstos dos últimos se llevan el 5%).   
  • El gasto total en salud en España para el año 2009 fue el 9,8% del PIB. En EEUU esta cifra es de 17,6%, en Francia el 11,9, en Alemania el 11,7; en Italia el 9,4; en Japón 9,5 y en Rusia el 5,6.    


Estadísticas de obesidad de Estados Unidos
(Datos de la Encuesta Nacional de Salud y Examen de Nutrición de EEUU, 2007-2010)

• Más de una tercera parte de los adultos mayores de 65 años en EEUU eran obesos en 2007-2010.

• La prevalencia de obesidad fue mayor entre los 65-74 años en comparación con los mayores de 75 años, tanto en hombres como en mujeres.

• La prevalencia de la obesidad en las mujeres de 65-74 años fue mayor que en las mujeres de 75 y más años en todos los grupos raciales y étnicos, excepto las mujeres no hispanas negras, donde aproximadamente uno de cada dos eran obesos entre ambos grupos de edad.

• En 2050 se espera que el número de adultos estadounidenses mayores de 65 años fuese más del doble, aumentando de 40,2 millones a 88,5 millones. Tanto el envejecimiento, como la obesidad –actualmente uno de cada 3 estadounidenses mayores de 65 años la tienen—contribuirán a un mayor uso de los servicios de salud y también al gasto.

Nota: NHANES es una encuesta llevada a cabo por los Centros para el Control y Enfermedades (CDC) Prevención del Centro Nacional para Estadísticas de Salud (NCHS) para controlar la salud y el estado nutricional de la población civil no institucionalizada de EE.UU.  El estudio combina una entrevista en su casa y en un examen físico estandarizado en un centro de exámenes móvil.  Los datos de peso y talla para este informe fueron medidos en el centro de exámenes móvil.  Fuente: NCHS Data Brief, Número 106, septiembre 2012

ESTADÍSTICAS DE OBESIDAD DE INGLATERRA
Datos de sobrepeso y obesidad en niños y adultos en Inglaterra 2012

• Uno de cada cuatro adultos (26% de los hombres y mujeres mayores de 16 años) es clasificado como obeso en el año 2010 en Inglaterra (con ÍMC de 30kg/m2 o más).

• Una mayor proporción de hombres que de mujeres (42% frente al 32%) fueron clasificados con sobrepeso en 2010 (con IMC de 25 a menos de 30kg/m2).

• Las mujeres eran más propensas que los hombres (46% y 34% respectivamente) para tener una circunferencia de cintura elevada en 2010 (más de 88 cm para las mujeres y más de 102 cm para los hombres).

• Utilizando tanto el IMC y la circunferencia de la cintura para evaluar el riesgo de problemas de salud, el 22% de los hombres se estima en un riesgo mayor, el 12% de alto riesgo y el 23% en riesgo muy alto en 2010.  Cifras equivalentes para las mujeres fueron: 14%, 19% y 25%.

• En 2010, el 17% de los varones y el 15% de las niñas (de entre 2 y 15 años) fueron clasificados como obesos, con un incremento del 11% y 12%, respectivamente, desde 1995.

Nota: Estos datos provienen del informe NHS Health and Social Care Information Centre report publicado por la Asociación del Estudio de la Obesidad (ASO) en febrero de 2012. Presenta una amplia gama de datos sobre la obesidad y el sobrepeso entre los adultos y niños ingleses.

DATOS DEL INSTITUTO NACIONAL DE ESTADÍSTICA
(Boletín informativo del INE del 04/2012) 

• Un 16,0% de la población española es obesa y se puede decir que uno de cada dos está por encima de su peso normal. Más de la mitad de las personas de 18 años o más está por encima del peso considerado como normal. Este problema afecta en mayor medida a los hombres (62,8%) que a las mujeres (44,6%). La obesidad afecta a un 16,0% de la población de 18 años o más, y el sobrepeso, al 37,7%. En ambos sexos, el problema aumenta con la edad hasta el grupo de 65 a 74 años, momento en que disminuye.

• Según la Encuesta Europea de Salud (2009, de emisión quinquenal), en España siete de cada diez personas comen fruta al menos una vez al día y seis de cada diez toman verduras a diario. Pero entre los jóvenes (16 a 24 años), solo la mitad consumen fruta diariamente. Por lo que se refiere a la actividad física, las mujeres hacen menos ejercicio intenso que los varones (15,7% frente a 34,4%), pero practican más ejercicio físico moderado (42,7% frente a 26,0%), ya sea en su jornada laboral o en su tiempo libre.
           
ESTADÍSTICAS DE SOBREPESO Y OBESIDAD EN EL MUNDO

Obesity: update 2012 es el título del reporte dado a conocer por la OCDE el 21 de febrero de 2012. Contempla datos relevantes de sobrepeso y obesidad recogidos por la International Association for Study of Obesity (IASO) y otros informes elaborados por la Organización el 2010 y 2011.

• Al menos una de cada dos personas tiene sobrepeso u obesidad en más de la mitad de los países de la OCDE. El promedio de obesidad de las naciones OCDE se ubica en un 22%, mientras que la prevalencia de sobrepeso varía casi diez veces entre los países estudiados (Japón y Corea con un 4%, y Estados Unidos y México con un 36%). Se prevé que esta tendencia siga en aumento y en algunos países dos de cada tres personas tendrían obesidad dentro de diez años.

• El ranking es encabezado por Grecia, Estados Unidos, Italia, México, Nueva Zelanda y Chile.
 
• Los últimos datos muestran una desaceleración de la epidemia en varios países, con las prácticamente estable tasas de Corea, Suiza, Hungría e Inglaterra en los últimos diez años, y un leve incremento en Francia y España.  Sin embargo, los mayores incrementos se registraron en Irlanda, Canadá y los Estados Unidos.

Una persona obesa incurre en un 25% más los gastos de salud que una persona de peso normal en un año determinado.  La obesidad es responsable de 1-3% del gasto sanitario total en la mayor parte de países de la OCDE países (5-10% en los Estados Unidos).

• Según el estudio de la OCDE, las personas obesas ganan hasta un 18% menos en comparación con las personas que no tiene problemas de sobrepeso.

Mujeres sin formación académica son dos a tres veces más propensos a tener sobrepeso que las que tienen estudios superiores, mientras estas diferencias no se observan entre los hombres.

Otro informe de la OCDE, Obesity and the Economics of Prevention: Fit not FAT, ha recogido los siguientes datos de interés sobre la situación de sobrepeso y obesidad en España.

  • La tasa de obesidad en adultos en España es superior a la media de la OCDE, y la obesidad en niños es de las más altas. 
  • Dos de cada tres personas tienen sobrepeso en nuestro país, una de cada seis es obesa, además uno de cada tres niños entre 13 y 14 años tiene sobrepeso. 
  • El número de adultos con sobrepeso se ha mantenido estable desde el 2000, pero se ha elevado un poco el número de adultos con obesidad. 
  • Según todos los datos, se espera que las tasas de obesidad y sobrepeso crezcan en esta década, eso sí, con un máximo del 7% (lo que no es poco). 
  • Como datos curioso y muy significativo, las diferencias sociales influyen mucho en el estado físico de las mujeres en nuestro país, no así en el de los hombres. De manera que las mujeres con educación deficiente tienen 3,2 posibilidades más de tener sobrepeso que las mujeres de mayor educación.

Otros datos relevantes que han protagonisado los titulares en  el 2012 

  • La crisis económica es la culpable del aumento de casos de obesidad a nivel mundial, ya que ha empujado a los consumidores a buscar productos más baratos, y, en consecuencia, menos nutritivos, revela el informe Generación XXL, elaborado por IPSOS (2012). 
  • El 31 por ciento de los pacientes con obesidad presenta ansiedad y un 35 por ciento antecedentes de un trastorno depresivo, según un estudio realizado por la unidad de Psiquiatría del Hospital Universitario Infanta Leonor de Madrid (2012). 
  • Los españoles con sobrepeso representan el 39,4 por ciento de la sociedad, los obesos el 22,9 por ciento y las personas con obesidad abdominal –«la más peligrosa»– el 35,5 por ciento. Además, esta enfermedad se suele dar mayoritariamente entre los hombres aunque, las mujeres suelen tener una mayor obesidad –39,2 por ciento frente al 31,7 por ciento de los varones–. Fuente: datos del estudio ‘Enrica’, relativos al periodo de 2008 y 2010.
  • En nuestro país, el trastorno por ansiedad generalizada, afecta a dos mujeres por cada hombre y suele iniciarse entre los 20 y los 30 años, según datos del ‘Consenso Español sobre el Trastorno de Ansiedad Generalizada’. 
  • España se ha situado por delante de EEUU en obesidad infantil, con un 19% de niños obesos en este país frente al 16% de los estadounidenses, un porcentaje que triplica al de hace 30 años. Fuente: Estudio Pronaf.Para datos estadísticos de períodos anteriores, podéis consultar el resumen del año en estos links:
    2011:
    https://stopalaobesidad.com/2011/12/07/resumen-de-estadisticas-de-obesidad-2011/
    2010:
    https://stopalaobesidad.com/2010/11/15/la-obesidad-en-espana-y-en-el-mundo/   https://stopalaobesidad.com/2010/11/18/la-obesidad-afecta-cada-ano-400-mil-ninos-mas-en-la-ue/
    2009:
    https://stopalaobesidad.com/2012/10/27/estadisticas-obesidad-2009/

La mejor alimentación infantil para prevenir la obesidad

Durante mucho tiempo se ha debatido cuál es la mejor forma de introducir a los niños a los alimentos sólidos después de que dejan el período de amamantamiento.

BBC Salud
Los estudios hasta ahora se habían centrado en cuál es el mejor momento para dejar de amamantar y no cuál es la mejor forma de introducirlos a la alimentación.

Ahora una nueva investigación revela que lo mejor es ofrecer a los bebés una selección variada de porciones pequeñas de alimentos sólidos -como bocadillos- y dejar que ellos elijan sus favoritos.

Esta libertad de elección, afirman los investigadores de la Universidad de Nottingham, Inglaterra, no sólo tendrá un impacto positivo en la formación de hábitos sanos de nutrición, sino además protegerá al niño de una futura obesidad o sobrepeso.

Las recomendaciones de los expertos sanitarios afirman que la mejor alimentación en los primeros meses de vida es la leche materna y el consejo para las madres es que amamanten a sus bebés durante seis meses.

Pasado este período la forma tradicional de introducir a los infantes a la alimentación es darles purés o papillas variadas que la madre selecciona.

Pero el nuevo estudio, publicado en BMJ Open (Revista Médica Británica), encontró que es mejor dejar que sean los bebés los que elijan sus propios alimentos.

Esta forma de introducir la alimentación sólida puede ayudar a mantener un peso sano y proteger contra la obesidad más tarde en la vida, agregan.

Selecciones sanas

El estudio siguió a 155 niños de entre 20 meses y 6,5 años, cuyos padres completaron cuestionarios detallados sobre los hábitos alimenticios y preferencias de sus niños.

Entre los infantes, a 92 se les permitió alimentarse solos (con las manos) con bocadillos de alimentos variados y 63 fueron alimentados por sus padres con papillas a cucharadas.

Todos los niños recibieron durante el período de estudio alimentos de todos los grupos: carbohidratos, frutas y verduras, proteínas y productos integrales.

Los científicos sólo encontraron diferencias «significativas» en uno de los grupos alimenticios incluidos en el sondeo.

Los resultados mostraron que los niños que se alimentaron solos solían comer más carbohidratos que los niños alimentados con papillas.

Los carbohidratos eran los alimentos favoritos de estos niños.

Sin embargo, entre los niños alimentados con papillas, los alimentos favoritos eran los dulces.

«Se observó esta preferencia a pesar del hecho de que junto con los alimentos dulces, los niños alimentados con papillas recibieron más a menudo carbohidratos, frutas y vegetales, proteínas y alimentos integrales que los niños que se alimentaron con bocadillos» afirman los autores.

Al final del estudio se encontró que más niños alimentados con papillas tenían sobrepeso o eran obesos que los niños que comían bocadillos solos.

E incluso cuando se tomaron en cuenta factores como los socioeconómicos, o el peso al nacer y el peso de los padres, siguieron observándose los mismos resultados.

Tal como señala la doctora Ellen Townsend, quien dirigió el estudio, «nuestros resultados sugieren que los infantes que se destetan con un enfoque de alimentarse solos con sus propias elecciones aprenden a regular su consumo de alimentos en una forma que conduce a un menor IMC (índice de masa corporal) y a una preferencia por los alimentos sanos, como carbohidratos».

«Esto tiene implicaciones en el combate del bien documentado incremento de obesidad en las sociedades contemporáneas», agrega.