La mayoría de los restaurantes fomenta la obesidad

El 90% de los menús que sirven establecimientos de seis países rebasan con creces la cantidad de calorías recomendadas por la OMS para una comida saludable, según advierten dos estudios internacionales liderados por científicos de Estados Unidos y el Reino Unido.

Cadena Ser, por Javier Gregori

Dos equipos internacionales de científicos ha analizado los menús que sirven en restaurantes de seis países (entre ellos, Estados Unidos, China o el Reino Unido) y éste ha sido el resultado: en más del 90% de los casos la comida servida contenía más de 600 calorías, el límite máximo recomendado por la OMS, la Organización Mundial de la Salud.

A tenor de estos datos, esta investigación advierte que comer fuera de casa aumenta el riesgo de padecer obesidad, un problema que se ha multiplicado por tres en el mundo en las últimas cuatro décadas según la OMS.

Menús no saludables

En concreto, en un estudio que publica el “British Medical Journal”, investigadores de la Universidad de Liverpool analizaron las comidas que se sirven en 27 grandes cadenas de restaurantes del Reino Unido y han detectado que el 89% de los platos superan, con creces, el límite saludable de calorías.

Mientras tanto, otro equipo internacional midió también las calorías de los menús más frecuentes en 116 restaurantes de Estados Unidos, Brasil, China, Finlandia, Ghana e India, y encontraron también que el 94% de los platos superaban el límite. Y eso que en este cálculo no se incluía el postre y ni la bebida.

Recomendaciones

Para poder frenar la epidemia de obesidad que ahora afecta a la población mundial, este grupo de expertos recomiendan a los restaurantes que ofrezcan porciones más pequeñas, reduciendo también, de forma proporcional, el precio del menú para hacerlo más atractivo a sus potenciales clientes.

Además, por otro lado, piden también a los gobiernos que obliguen a etiquetar toda la comida que se sirve ahora fuera de casa.

«Comer fuera ahora es muy común en todo el mundo, pero es importante tener en cuenta que es fácil comer en exceso”, ha advertido la directora de esta investigación, Susan B. Roberts, de la Universidad de Tufts (EEUU).

Y atención, porque en el 3% de los menús analizados en este centenar largo de restaurantes escogidos al azar acumulaban más de 2.000 calorías.

 

Consejos para que los niños se alimenten bien en verano

CuidatePlus Marca, por María Molina

Las vacaciones ya han llegado para los más pequeños de la casa, y con ellas los problemas de mantener una alimentación adecuada y sana. Y es que la alimentación tiene un papel fundamental en esta época estival. La Iniciativa Europea de Vigilancia de la Obesidad Infantil de la Organización Mundial de la Salud (OMS) ya ha avisado de los problemas que sufre la población infantil de nuestro país, y es que 2 de cada 5 escolares de entre 6 y 9 años de edad padecen sobrepeso u obesidad, un 9 por ciento de los niños consume verduras de forma diaria, un 29 por ciento fruta, y un 22 por ciento dedica dos horas como mínimo a la semana a ver la televisión o al uso de la tecnología. Otro dato preocupante es que un 31 por ciento de los niños practica deporte, pero solo como actividad extraescolar.

Para cambiar estos hábitos que acaban influyendo en el crecimiento y en el desarrollo de los niños, el Instituto Médico Europeo de la Obesidad (IMEO) indica una serie de pautas, consejos y recetas saludables.

“Para empezar, es fundamental implicar a los niños en las tareas relacionadas, desde el momento de la compra para familiarizarse con el aspecto natural de los alimentos hasta el emplatado”, indica Carmen Escalada, nutricionista clínica del centro citado. Además, tanto los niños zurdos como diestros suelen comer mejor la comida que tienen a izquierda y derecha respectivamente, por lo que se recomienda situar los alimentos que menos les gustan a esos lados. Otra manera de que los niños coman mejor los alimentos que más se resisten en el plato es presentándolos con formas originales y divertidas.

La importancia de los micronutrientes en la dieta de los niños

Los micronutrientes son “sustancias contenidas en los alimentos, que no aportan energía y que son necesarios en cantidades mínimas; sin embargo, desempeñan un papel fundamental en distintos procesos metabólicos y bioquímicos de nuestro organismo y de allí su importancia en la edad de crecimiento”, señala Sonia Peinado, experta en nutrición pediátrica del IMEO. Es en este grupo dónde se sitúan las vitaminas (A, B, CDE y K) y los minerales, siendo imprescindibles en la alimentación de los menores el potasio y el magnesio, el calcio, el hierro, el cobre, el zinc, el cromo y el cobalto.

Recetas  para despertar el apetito de los más pequeños

Para que los niños tengan una dieta saludable, degusten todos los alimentos y reciban las vitaminas y minerales necesarios en esta época del año, algunos platos que podemos preparar para los más pequeños son:

  • Bocaditos saludables. Se pueden preparar de varias formas. “La opción clásica sería con pan integral, artesanal o de semillas, desechando así las variedades de pan blanco o congelado de escasa calidad”, afirma Andrea Marqués, nutricionista y experta en gastronomía del IMEO. Otra posibilidad es preparar el bocadito con tortitas de maíz o sin pan, y cortar y vaciar un tomate de tamaño mediano por la mitad, mezclar la pulpa con atún y añadir queso fresco.
  • Mini pizzas vegetales de berenjena y calabacín. Para este plato los ingredientes que se necesitan son: berenjena, calabacín, tomate, aceite de oliva, queso parmesano y champiñón y sal.
  • Polos de frutos rojos y yogur. Para preparar estos polos se necesitan 200 gramos de frutos rojos, 250 gramos de yogur natural y almíbar hecho con 30 gramos de azúcar moreno y 75 mililitros de agua.
  • Crema de calabaza y queso. Los ingredientes para hacer esta crema son los siguientes: 500 gramos de calabaza, 30 gramos de queso parmesano, aceite de oliva, caldo de verduras y sal.

Consejos para comer fuera de casa

No solo debemos cuidar la alimentación de los niños dentro del hogar, sino también fuera de él. “Hay que hacer entender los niños que comer fuera no implica permiso para saltarse las reglas, ni una recompensa o premio”, señala Mireia Elías, nutricionista del IMEO.

Para elegir los entrantes y primeros platos es recomendable escoger entre una gran variedad de platos. Algunas opciones son el hummus de legumbres, purés de calabaza, brócoli, acelgas, zanahoria o de batata o ensaladas de lechuga, jamón york, tomate cherry y mozzarella con vinagreta de limón; y para su aliño se aconseja utilizar aceite y vinagre.

Para los platos principales, los platos más saludables que podemos escoger para los niños son: hamburguesas de pavo y calabacín, mini pizzas de verduras, espaguetis con brécol y pesto, macarrones con salsa de verduras, tortillas francesas con jamón, atún o verduras; o albóndigas con salsa de tomate natural triturado.

La mejor bebida para acompañar a la comida es el agua, aunque también existen otras posibilidades como la leche semidesnatada, el zumo de frutas y los refrescos “cero”, pero estos últimos, de forma puntual.

Zumos y dieta dietox para resetear tu organismo

Telva, por Gloría Vázquez Sacristán

depurar el organismoNos enfrentamos a una época complicada a varios niveles. Nuestra agenda se llena de miles de eventos (cenas, comidas, meriendas de Navidad) y nuestros hábitos alimenticios se descolocan por completo. Comemos y bebemos más. Y día a día esto acaba causando estragos en nuestro organismo. ¡Necesitamos hacer una cura interna a nuestro cuerpo! Sí, hablamos de las famosas dietas detox que echarán una mano a tu body para liberarse de las toxinas que te hacen parecer más hinchada, tener una piel apagada e incluso no lograr perder esos kilitos que nos sobran. Descubre, de la mano de dos expertas, los beneficios de estas dietas tan de moda y los hábitos alimenticios que tendrás que realizar para lograr «limpiar» tu organismo.

¿Qué significa hacer detox? «Hacer un detox significa ofrecerte a ti mismo un break, un momento de relax: desconectar de la rutina, permitiendo a tu organismo limpiarse desde dentro. No sólo a nivel alimentario, sino mental y físico«. «Un detox global implica un cambio al 100% de rutinas y hábitos durante un mínimo de 3 días«, explica la doctora en Naturopatía Louise de Sayve.

Esto implica que introduzcas las pautas correctas para que el resultado sea el beneficioso para tu organismo. Puedes realizar dietas controladas por expertos o acudir a un retiro itinerante como el de The Green Shelters que combinan detox desde todas sus facetas: ejercicio, alimentación, meditación… y relax auténtico.

¿Son necesarios o es una moda? Sayve responde: «Hacer una ‘cura’ detox no sería, en teoría, necesario para todo el mundo. Pero sí para la gran mayoría de los que vivimos inmersos en un lifestyle al más puro estilo S. XXI (polución, estrés y con una dieta poco equilibrada)«.
«Para mantenerse sano, resulta esencial liberar el cuerpo del exceso de toxinas«, es decir ayudar a nuestro cuerpo a eliminar los excesos de toxinas que pueden perjudicar nuestra salud y el correcto funcionamiento del cuerpo.

¿Quienes deberían hacer dietas detox? «La polución, ciertos estilos de vida marcados por el sedentarismo, el estrés crónico y una nutrición desequilibrada forman parte del día a de muchos y son precisamente esos tres factores los principales causantes de un sobre-exceso de toxinas. Para ellos, purificar el organismo con cierta regularidad es esencial«.

Un toque detox en tu día a día: agua caliente con limón

agua con limón«Tomar cada día, nada más levantarte, agua caliente con unas gotas de zumo de limón (el estómago agradece que lo primero que recibe en la jornada no sea frío; las bajas temperaturas le dificultan los procesos digestivos), ayuda a eliminar el exceso toxinas: facilita los correctos procesos depurativos, impulsando la eliminación de toxinas a lo largo del día y, además, ¡ayuda a despertarse!«, explica Marion Thelliez, doctora en Naturopatía, miembro del equipo de retiros itinerantes healthy detox The Green Sheltes.
La regla de oro: espera 15 minutos antes de tomar nada más.

Receta del zumo: Agua caliente con zumo de limón natural. Si no te gusta el sabor, puedes añadirle un poco de jengibre para camuflar la acidez. Importante: nada de azúcar.

Receta para un día detox: un día a arroz (1 vez a la semana o 1/2 veces al mes)

arrozThelliez explica que: «Optar por un solo tipo de alimento durante un día entero es una fórmula detox clásica y muy eficaz. Si el alimento elegido tiene propiedades depurativas, como la piña (clásico entre los clásicos para la mono-dieta) y resulta fácil de digerir funciona aún más. Otro alimento que en naturopatía empleamos mucho como limpiador: el arroz. Ayudar a realizar una especie de «cepillado» depurativo del aparato digestivo, ayuda a evacuar el exceso de toxinas«.

Importante: ¡sólo comes un alimento! Sin mezclar con ningún otro. Si eliges pasar un día comiendo sólo arroz, no lo puedes mezclar ni con otros elementos ni con salsas o aceites. Puedes «mejorarlo» con especias como cúrcuma, canela, vainilla, hierbas aromáticas (tomillo, romero, orégano…).

Consejo: Apuesta por el Basmati. Si tienes problemas de estreñimiento mejor elige otro alimento.

Detox líquido intensivo. 2 ó 3 días. Dos veces al año

dieta detox«Nunca más de tres días, salvo que se realice con supervisión médica». «Las curas detox a base de líquidos son la receta para deshacerse del exceso de toxinas y para ganar energía. Al evitarle gran parte del trabajo habitual al aparato digestivo, la energía que nuestro organismo normalmente tiene que destinar a procesar los alimentos no líquidos a través de la digestión, nos hace estar más activos e incluso de mejor humor. Además ¡ayuda a deshincharse y disparar la luminosidad de la piel!«.

Importante: Nada de zumos procesados. Opta por frutas, verduras y hortalizas frescas (preferiblemente de cultivo orgánico) y consumir los zumos (la cantidad por persona/día debe ser de 2,5 litros) y las sopas. Mejor si todo está recién hecho.

Truco: Elegir 2 ó 3 días tranquilos en los que evitemos salir a comer fuera de casa.

Las expertas de The Green Sheltes nos dan el menú tipo para hacerlo durante 3 días.

Día 1

Desayuno: Zumo alcalino regenerante (zanahoria, manzana, remolacha, granada, jengibre, limón y menta fresca) + 1 cucharada sopera de granos de chía.

Media Mañana: 1 Infusión: antioxidante de Cassis (grosella negra) o digestiva de anís,
menta, verbena y regaliz. (Común a todos los días).

Almuerzo (medio-día): Zumo especial para limpiar el hígado. A base de apio, perejil,
espárragos verdes, naranja, cúrcuma, jengibre y algas Klamath.

Media-tarde/ Merienda: 1 vaso de leche de almendras o un puñado de pepitas de cacao crudo. (Común a todos los días).

Cena: Sopa depurativa de verduras: apio, nabo, zanahoria, batata, patata, puerro, tomate kale y perejil.

Día 2

Desayuno: Zumo digestivo y antiinflamatorio (manzana, hinojo, jenjibre y cúrcuma) + 1 cucharada sopera de granos de chía.

Almuerzo (medio-día): Zumo depurativo del riñón (remolacha, limón, espinacas, rábano,
jengibre, cúrcuma y alga Klamath).

Cena: Sopa depurativa de verduras: apio, nabo, zanahoria, batata, patata, puerro, tomate kale y perejil.

Día 3

zumo antioxidanteDesayuno: Zumo antioxidante (Pera, espinacas, kale, agua de coco, perejil y limón) + 1 cucharada sopera de granos de chía.

Almuerzo (medio-día): Zumo digestivo hidratante de pepino, acelgas, apio, perejil, menta, corianda, jengibre y algas Klamath.

Cena: Sopa depurativa de verduras: apio, nabo, zanahoria, batata, patata, puerro, tomate kale y perejil.

La dieta del vino y del jamón ayuda a perder de cuatro a seis kilos en un mes

  • ¿Te imaginas poder perder peso incluyendo en tu dieta dos alimentos tan sabrosos como el vino y el jamón? Descubrimos las claves de esta dieta, de la mano de su creador, el experto en nutrición, Rubén Bravo.
dieta del vino y el jamónLa dieta del vino y del jamón es un régimen diseñado para perder entre cuatro y seis kilogramos en cuatro semanas, aunque como explica su creador, Ruben Bravo, experto en nutrición y gastronomía del Instituto Médico Europeo de la Obesidad, es importante tener en cuenta las instrucciones nutricionales individuales previstas para mujeres, hombres o deportistas.

Se basa en el consumo diario de dos superalimentos: el vino y el jamón. «Tanto el jamón ibérico como el vino tinto son dos alimentos con demostradas propiedades para la salud, y que en un consumo moderado y pautado nos ayudarán a prevenir multitud de enfermedades del corazón y degenerativas, al mismo tiempo que notaremos su efecto reconstituyente, aportándonos una sensación de vitalidad diurna y descanso nocturno», resalta Rubén Bravo. Es recomendable en primavera, pues ayuda a combatir la astenia primaveral.

Las bondades del vino

Está demostrado que tomar vino tinto con moderación puede reducir el riesgo de enfermedad coronaria, arterioesclerosis, Alzhéimer o demencia, según explica el experto de IMEO. Su consumo durante miles de años le ha atribuido los efectos de elixir de larga vida gracias a su capacidad de retrasar el envejecimiento celular del organismo.

Tal como recuerda Bravo, el francés Serge Renaud afirmó en el Congreso Vinsalud del 2002 en Santiago de Chile que las personas hipertensas que consumen vino tinto con frecuencia pero con moderación, reducen hasta un 40% el riesgo de mortalidad por episodios cardiovasculares. Igualmente desde que en 1997 se publicase en la revista Science un trabajo de la Universidad de Ilinois sobre la capacidad del resveratrol como inhibidor de las células cancerígenas, se han produciendo multitud de estudios posteriores contrastando estas afirmaciones.

Los beneficios del jamón

El jamón, por su parte, es una fuente de hierro y vitaminas del grupo B, necesarias para el funcionamiento del sistema nervioso, el cerebro y para mantener la masa muscular sin carencias en aminoácidos esenciales. El perfil lipídico del jamón ibérico destaca por su bajo contenido en grasas saturadas y un alto contenido en ácidos grasos monoinsaturados como el ácido oleico, que favorece la salud cardiovascular.

Los estudios que apoyan los beneficios del jamón ibérico para prevenir y mejorar las enfermedades del corazón son más recientes que los del vino tinto, y rompen con la controversia entre profesionales que lo encuadraban como perjudicial, y el grupo de especialistas como Rubén Bravo, autor de la dieta, que lo defendían argumentando que no es cierto que eleve los triglicéridos, engorde y favorezca la hipertensión… Su efecto es todo lo contrario, tal como demostró en febrero de 2015 un estudio realizado por el Hospital Ramón y Cajal donde comprobaban sus beneficios sobre la memoria, en su reducción de la tensión arterial, y como potente vasodilatador proporcionando un importante efecto antioxidante, según reveló José Sabán, responsable de la Unidad de Endotelio y Medicina Cardiometabólica del hospital madrileño.

Jamón y vino: cómo, cuánto y cómo  

El jamón de bellota es la mejor opción entre los ibéricos, ya que es un alimento bajo en grasas menos saludables, con un complejo de vitaminas muy elevado y con un 50 por ciento más de proteínas de alta biodisponibilidad que el resto de carnes frescas. «Pautamos unos 120 gramos tanto para hombres como para mujeres, distribuidos en desayuno y cena, y unos 150 gramos para aquellos que practiquen deporte, aunque comenzaremos a disfrutar sus efectos terapéuticos a partir de los 50 gramos al día», según indica el experto del IMEO.

Todos los días durante las cuatro semanas de la dieta se incluye el vino tinto y el jamón ibérico, al mismo tiempo que una gran variedad de alimentos nacionales preparados, en su mayoría, de manera tradicional.

«El jamón ibérico se puede añadir de forma habitual como picoteo o aperitivo en las cenas, una costumbre que cada vez observamos más en las consultas, sobre todo en personas muy ocupadas y con falta de tiempo para preparar platos más elaborados», sugiere el experto.

Lo que no puede faltar y lo que debes evitar

DESAYUNO: El desayuno no se puede omitir y en él no puede faltar el pan, el jamón y la fruta. Los ingredientes y la cantidad varían en función del sexo y la condición física de la persona, según revela Rubén Bravo. El café, a ser posible, debe ser descafeinado y se puede acompañar de leche desnatada. Por regla general en esta dieta se evitan el plátano, el mango y el melón, porque aportan más calorías por 100 gramos que la mayoría de las frutas. A cambio, se aconsejan la manzana, la naranja, la pera, las fresas o el melocotón.

COMIDA: A la hora de la comida no puede faltar la verdura, ya sea en forma de ensalada o puré, rehogada o al horno. El plato principal puede ser pescado o carne, de lo más variado: salmón, anchoas, rape, merluza, panga, sepia, almejas, bacalao, atún, pollo, pavo, conejo, ternera y solomillo de buey o carne magra de cerdo, opciones acordes con el estilo saludable mediterráneo.

MERIENDA: Descafeinado con leche, yogur y dos nueces son la combinación perfecta para la merienda. Los lácteos en esta dieta siempre son desnatados (0% grasa). De esta manera aportamos proteínas de alto valor biológico, hidratos de carbono con alto contenido en fibra y grasas cardioprotectoras.

CENA: En la cena no puede faltar el caldo (de puchero, de verdura o pollo), dos lonchas de jamón ibérico (unos 15 gramos cada) y una cantidad determinada (80-150 gramos) de carne (pollo, pavo, cerdo o ternera) o pescado/marisco (emperador, boquerones, sardinas, melva, ventresca de bonito, atún, palitos de cangrejo, mejillones, pulpo, sepia). Para finalizar el día los expertos del IMEO sugieren tomar una onza de chocolate negro puro (sin leche, ni azúcar), para beneficiarnos de su efecto antioxidante y anti arteriosclerosis.

Se aconseja evitar el pan en la comida y cena. Este alimento queda reservado para el desayuno, el momento del día donde nuestro organismo requiere de mayor aporte energético, pues la Dieta del Vino y el Jamón ha sido configurada bajo los patrones de la ritmonutrición basados en los ciclos del biorritmo humano, una tendencia que ya se apuntaba en nuestro refranero tradicional: «Desayunar como un rey, comer como un príncipe y cenar como un mendigo».

TIPO DE VINO

Para beber, recuerda que puedes beber agua sin límite. En cuanto al vino, el patrón de consumo diario recomendado de tinto es de una copa de 150 ml en el caso de las mujeres y hasta dos copas de la misma cantidad en los hombres, repartida en la comida y la cena.

El vino debe ser tinto, según aconseja Rubén Bravo, quien explica que la potente terapéutica del resveratrol y los taninos se encuentran principalmente en la piel de la uva, y en el caso del vino tinto la maceración en su proceso de elaboración se realiza con la uva completa, algo que no ocurre con el vino blanco y sólo se realiza en la fase inicial en el vino rosado.

Dentro de los vinos tintos recomienda los elaborados con la variedad de uva Pinot Noir, Merlot y Tempranillo, al encontrarse entre las tres variedades con más concentración de resveratrol (Pinot Noir 6,25 mg. por litro, Merlot 5,05 mg. por litro y Tempranillo 4,14 mg. por litro). Como ejemplos, Rubén Bravo cita el Marques de Vargas (Reserva Privada 2005) elaborado con Tempranillo, Mazuelo, Garnacha y otras, o el Conde de San Cristobal (D.O. Ribera del Duero) con Cabernet Sauvignon y Merlot.

¿Es sano saber al detalle las calorías de un menú?

La FDA americana ha dado de plazo un año a los restaurantes, entre otros locales de hostelería, para informar en sus menús sobre el contenido calórico de cada plato. En España, expertos discrepan sobre esta medida. De una parte está la opinión del Instituto Médico Europeo de la Obesidad, que la valora positivamente. De otra, la responsable de la Unidad de trastornos alimentaria del Clínico de Madrid, que ve un posible riesgo de obsesión en forma de recuento.

Correo Farmacéutico, por Ana Callejo Mora
Saber cuantas calorías tiene cada menú nos ayuda a elegir bienLa agencia reguladora de medicamentos y alimentos (FDA, en inglés) de Estados Unidos presentó a finales de noviembre del pasado año dos regulaciones que exigen incluir información sobre las calorías en los menús y tableros de menús en cadenas de restaurantes, establecimientos de venta de alimentos y máquinas expendedoras con 20 o más ubicaciones . El objetivo es ofrecer a los consumidores mayor información nutricional acerca de los alimentos que consumen fuera de casa. Estas regulaciones, exigencia de la Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio y Protección del Paciente de 2010, piden  a los establecimientos contemplados (ver cuadro) proporcionar, a solicitud del consumidor y según se indique en los menús y los tableros de menús, información nutricional adicional por escrito sobre el número total de calorías y el número de calorías derivadas de la grasa, así como el contenido total de grasa, el de grasa saturada y el de grasa trans, y el contenido de colesterol, sodio, carbohidratos totales, azúcares, fibra y proteína.

Los restaurantes y otros establecimientos similares de venta de alimentos tendrán un año para cumplir con los requisitos de etiquetado, mientras que para los administradores de máquinas expendedoras el plazo será de dos años.

A Rubén Bravo, especialista en Nutrición y Gastronomía y portavoz del Instituto Médico Europeo de la Obesidad (IMEO), le parece una iniciativa muy positiva, pues, «por un lado, el consumidor estará mucho más informado y podrá tomar decisiones más acertadas sobre los alimentos que come fuera de casa, y, por otro, presiona a la industria alimentaria para competir no sólo en precios y sabores, sino también para proporcionar alimentos más saludables e hipocalóricos».

La pregunta es obligada: ¿tendría sentido una medida de este tipo en España? Según el portavoz del IMEO, «se debería implantar tanto aquí como en el resto de países que configuran el top 30 de los que tienen mayores tasas de obesidad mundial (lista encabezada por Estados Unidos, según un informe de 2012 de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico). Ayudaría de forma muy favorable a reducir los niveles de obesidad, sobrepeso, diabetes, hipercolesterolemia e hipertensión, mejorando de esta manera la salud de las diferentes franjas poblacionales».

Sin embargo, Bravo reconoce que, para que la medida se hiciera efectiva en España, «muy posiblemente tendría que comenzar como una iniciativa propuesta en la Unión Europea y sus estamentos pertinentes».

Esta regulación traerá más efectos positivos que negativos para el consumidor, afirma el especialista en Nutrición, aunque «es posible que en casos muy concretos y escasos pudiera acentuar un comportamiento obsesivo compulsivo incorporado en trastornos de alimentación, como la bulimia, el comedor nocturno o el compulsivo».

EL ‘PESO’ DEL RECUENTO
Marina Díaz-Marsá, responsable de la Unidad de trastornos de la conducta alimentaria del Hospital Clínico San Carlos, de Madrid, es más crítica con la decisión de la FDA: «Poner esta información tan a mano me parece negativo porque puede llevar a personas vulnerables, o incluso a la población general, a obsesionarse por contar las calorías». Lo que plantea la especialista es «que pusiera un mensaje más global como alimento recomendable o plato saludable», algo que ya incluyen algunas cartas de restaurantes españoles. «Las anoréxicas restrictivas cuentan las calorías a lo largo del día para limitarse la ingesta. Las bulímicas, a pesar de hacer recuento, tienden a descontrolarse, cosa que no ocurre en las anoréxicas nerviosas», puntualiza Díaz-Marsá.

Sobre la importancia del recuento de calorías en la prevención del exceso de peso, Bravo comenta que el total de calorías ingeridas al día o la semana es el primer paso para controlar y planificar un planteamiento tanto de pérdida de peso como de mantenimiento del mismo. «Aun así, cada persona trae asociado un metabolismo determinado y unas características individuales que nos indicarán, previos estudios concretos, las claves determinadas en su prevención contra el exceso de peso. En nutrición no todo son kilocalorías, pues depende de qué alimentos aporten esa energía y cuándo consumamos dichos alimentos. No obstante, las calorías sí son la base para comenzar a estructurar una forma de alimentación determinada».

Lo que exige la FDA

Resumen general de los requisitos de etiquetado de la FDA para los restaurantes, establecimientos similares de venta de alimentos y máquinas expendedoras.

¿Qué cubre?

  • Los restaurantes y los locales de comida rápida, las panaderías, los cafés, y las comidas «estilo restaurante» que venden ciertos supermercados y tiendas de autoservicio.
  • Las comidas para llevar y de entrega a domicilio, como las pizzas.
  • Las comidas que se compran desde una ventanilla de servicio para automóviles.
  • Los alimentos que uno mismo se sirve en una barra de ensalada o de comida caliente.
  • Las bebidas alcohólicas, tales como los cócteles, cuando se incluyen en el menú.
  • Las comidas que se venden en centros de entretenimiento, como son las salas de cine.
  • La regulación es para las máquinas expendedoras y sólo afectan a los que administren 20 máquinas o más.

¿Qué no cubre?

  • Los alimentos que se venden en las barras de viandas frías y que normalmente están destinados para el consumo de más de una persona.
  • Las botellas de licor que se exhiben detrás de una barra.
  • Los alimentos que se encuentran en vehículos de transporte, tales como cocinas móviles, aviones y trenes.
  • Las comidas que aparecen en el menú de escuelas primarias, secundarias y preparatorias que formen parte de los programas de alimentación escolar del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (aunque sí contempla las máquinas expendedoras disponibles en los lugares citados).

(Fuente: FDA)

Desciende un 24% en Estados Unidos la adquisición de tartas, pasteles y donuts

Al observar el comportamiento de los estadounidenses en el supermercado ya se atisba un cambio -a mejor- en su alimentación. Un estudio publicado en el último número del Journal of the Academy of Nutrition and Dietetics concluye que, dentro de las compras globales de los consumidores de Estados Unidos, en los últimos siete años ha descendido un 24 por ciento la adquisición de postres listos para tomar, como las tartas, galletas, pasteles y donuts.

Los investigadores, coordinados por Kevin C. Mathias, del Departamento de Nutrición de la Universidad de Carolina del Norte,  midieron, en el periodo comprendido entre 2005 y 2012, si las compras de los citados productos habían crecido o disminuido.

Según los autores de esta investigación, el desarrollo de nuevos sistemas de etiquetado en la parte frontal de los envases, que conduce al consumidor hacia productos con menor contenido en calorías, azúcar y grasas saturadas, supone una oportunidad para ayudar a los consumidores a mejorar su ingesta alimenticia.

Otro de los descubrimientos de este análisis es que entre 2005 y 2012 se ha producido un pequeño cambio en el contenido nutricional de estos postres industriales.

En 5 ideas

1. Nuevo reglamento

La FDA americana presentó a finales de noviembre de 2014 dos regulaciones que exigen incluir información sobre calorías en los menús de los restaurantes y las máquinas expendedoras.

2. Cambio en estados unidos

En Estados Unidos se está empezando a ver un cambio nutricional. Un estudio de la Universidad de Carolina del Norte concluye que las compras de postres industriales han bajado.

3. Problema en anorexia

Las anoréxicas restrictivas cuentan durante el día el número de calorías que ingieren. Las bulímicas hacen recuento calórico pero tienden a descontrolarse.

4. Bajar de peso

El total de calorías ingeridas a lo largo del día o de la semana es el primer paso para controlar y planificar una dieta para la pérdida de peso o para el mantenimiento de éste.

5. No todo son kilocalorías

En nutrición no todo son las kilocalorías que se ingieren, ya que depende de qué alimentos son los que aportan esa energía y en qué momento se consuman esos alimentos.

Controlar los excesos de dulces y alcohol es clave para no ganar peso en Navidad

El Instituto Médico Europeo de la Obesidad (IMEO) ha creado distintas recomendaciones para la elaboración de un menú navideño alternativo y más saludable.
Correo Farmacéutico
tinto-foto-finish_1Las comidas de Navidad pueden convertirse en una pesadilla para aquellas personas que mantienen un ritmo de vida saludable pero que no conocen las posibilidades que existen para, sin renunciar a los platos tradicionales, disfrutar de una alimentación adecuada. El aumento de peso y la gran aportación calórica de estas comidas, unidos a los dulces y el alcohol que las acompañan, son las principales preocupaciones de los médicos.

Un estudio del Centro de Investigación sobre Fitoterapia (Infito) y la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación (Sedca) asegura que durante las fiestas navideñas las comidas pueden llegar a contener entre 1.500 y 1.800 calorías de media, sin tener en cuenta la ingesta de bebidas alcohólicas. Los médicos proponen una serie de recomendaciones alimenticias que permiten reducir a la mitad el aporte calórico de las cenas y almuerzos y evitar el aumento medio de entre 4 y 6 kilos de peso durante la Navidad.

Alberto Sacristán, miembro del Grupo de Nutrición y Alimentación de la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (Semfyc), define estas comidas como «una bomba de relojería» para el organismo. El experto recomienda un aumento de la actividad física durante estos días, ya sea practicando algún deporte o actividades más relajadas como pasear.

Sacristán pide también tener en cuenta los alimentos seleccionados, escoger formas de cocinarlos que no impliquen la utilización de grasas y evitar la fritura. En las comidas recomienda sustituir los fritos, como croquetas o empanadillas, y las proteínas grasas del cochinillo, el cordero o el cabrito, por fiambres magros, marisco y pescados y fuentes de proteínas magras como pueden ser la ternera, el pavo, la lubina, el besugo o el pulpo.

Exceso de dulces y alcohol
Según Rubén Bravo, experto en nutrición y portavoz del Instituto Médico Europeo de la Obesidad (IMEO), en el caso de España el mayor aporte calórico durante los días navideños proviene de la ingesta desmesurada de alcohol y dulces navideños. Para evitar estos excesos el nutricionista explica que una copa de whisky o de ginebra equivale en su aporte calórico a 3 o 4 copas de vino y propone brindar con cava o champán en lugar de con chupitos.

Bravo recomienda ser «realistas» a la hora de proponer recomendaciones para las comidas navideñas y pide disfrutar con los platos y masticar despacio. Además, preguntado por Diario Médico, sugiere tomar una merienda equilibrada con fruta, hidratos de carbono y proteínas magras como jamón york o pavo para reducir el apetito en los momentos previos a las cenas.

Respecto de los dulces, Bravo ha explicado que los turrones, mazapanes y polvorones tienen muchas más calorías, aunque ha reconocido que no es posible «prohibirlo todo» y hacer una dieta muy estricta en navidades. «Nosotros hacemos una lista de alimentos que podemos reducir su consumo y otra lista de alimentos que siguen siendo sabrosos y ricos por los que los podemos sustituir sin que suponga un sacrificio muy grande», ha dicho.

El IMEO recomienda elaborar un postre tradicional como un flan de huevo o unas natillas y, posteriormente, dulces navideños para aquellas personas que aún no estén saciadas. Rubén Bravo sugiere también a la hora de encargar otro dulce típico de Navidad como es el roscón de reyes escoger uno tradicional sin relleno, para reducir sus calorías a la mitad.

La nutricionista Maribel Lopera propone elaborar una «dieta de depuración» para los días previos y posteriores a los días de fiesta. «Una dieta de depuración debería contener por ejemplo un caldo vegetal, ensaladas, frutas y yogur», explica Lopera a Diario Médico. Además, recomienda no beber más de un litro de agua durante este tipo de dieta y optar por otros líquidos como la limonada.

Lopera también recalca la importancia de hacer varias comidas, incluso en los días más señalados, y recuerda la necesidad del desayuno y la merienda. Además, propone la creación de una especie de diario personal en el que el individuo apunte lo que va comiendo a lo largo de las fiestas para así ser consciente de si estamos alimentándonos adecuadamente o no.

Problemas de salud

Varios estudios científicos han demostrado cómo se disparan algunos neurotransmisores como la dopamina frente al exceso de azúcares, lo que puede producir en algunas personas ansiedad e incluso depresión en los días posteriores a la Navidad, según Rubén Bravo. «Se puede sufrir un síndrome postvacacional en las dos semanas posteriores a las vacaciones de Navidad», ha asegurado Bravo a DM.

Los excesos durante la Navidad pueden generar problemas de salud como gastritis, digestiones pesadas, diarreas, vómitos o dolor cabeza, según explica Alberto Sacristán. Además, ha llamado la atención a aquellas personas con hipertensión, exceso de ácido úrico o patologías como diabetes o sobrepeso para que moderen la ingesta de alimentos.

 

Nutricionista afirma que sería positivo mostrar cómo quemar las calorías ingeridas en los restaurantes

Europa Press Televisión

Rubén Bravo del IMEO ante Europa Press Tv   El Instituto Médico Europeo de la Obesidad (IMEO) ha afirmado este sábado que sería una «buena idea» que los menús de los restaurantes mostrasen el ejercicio necesario para quemar las calorías ingeridas ya que, «de un primer vistazo», el consumidor podría elegir la comida más apropiada a su actividad física diaria.

En declaraciones a Europa Press Televisión, el experto en Nutrición y portavoz del IMEO, Rubén Bravo, ha argumentado que se trataría de una «buena iniciativa» de concienciación de cara a una alimentación más saludable que en las cartas de los restaurantes se mostrara no sólo las calorías, como ya exhiben algunos establecimientos, si no que también enseñaran el tiempo necesario para quemarlas.

«Actualmente al ver el etiquetado de las calorías de los alimentos muchas personas se pierden, se confunden e intentan predecir si ese alimento engorda o no. Pensar que ese alimento que voy a comer me va a requerir de cierta actividad física es una forma muy visual para ver si merece la pena o no comer un alimento muy calórico«, ha explicado.

No obstante, Bravo ha matizado que se trataría de «pautas generales» que no «siempre» valdrían igual para todos los clientes. Por ello, ha afirmado que si realmente una persona se plantea perder peso se deje recomendar por un especialista que le elabore un plan «personalizado» y concreto para su edad, actividad física y adaptado a sus gustos alimentarios.

Además, desde IMEO han afirmado que esta iniciativa debería de estudiarse con «más profundidad», analizando el tipo de ejercicio adecuado para cada edad, sexo, peso y estatura de cada individuo. «A mayor edad se gasta menos calorías, aún con la misma actividad física«, ha ejemplificado Bravo.

Así se ha referido el nutricionista sobre la investigación de la ‘Texas Christian University’ (TCU) que señala que mostrar en el menú de los restaurantes los minutos de ejercicio necesarios para quemar las calorías que se ingieren en los alimentos da buenos resultados.